El Partido Socialista de Castilla-La Mancha y su secretario general, Emiliano García-Page, han salido razonablemente satisfechos del Comité Federal que ha convocado para noviembre las elecciones primarias que habrán de elegir al próximo candidato socialista a la Moncloa.
Aunque la postura de Page y de destacados socialistas castellano-manchegos era favorable a que las primarias se hubieran celebrado antes de las elecciones europeas, se han sacado la espina de conseguir que al menos fueran este año. No es lo que buscaban, pero al menos se ha despejado el fantasma de que el PSOE no afrontase su liderazgo suficientemente antes de las autonómicas y municipales. La postura más crítica con el calendario oficial ha vuelto a ser de un castellano-manchego, el expresidente y ex secretario general del PSOE de CLM, José María Barreda, uno de los dos únicos miembros del Comité Federal que no votó a favor del calendario propuesto por Alfredo Pérez Rubalcaba.
Emiliano García-Page se cae de las quinielas mediáticas de precandidatables, mientras todos los demás asumen el compromiso de no hablar de sus verdaderas intenciones hasta que pasen las europeas. El alcalde de Toledo y líder de los socialistas castellano-manchegos sigue el trazado de su hoja de ruta interna reforzando las alianzas internas con los líderes del futuro. No creo que sea casualidad que el próximo 29 de enero debute en Madrid con un desayuno informativo en el Ritz en el que será presentado ni más ni menos que por Susana Díaz. La foto tiene mucho morbo y los detalles de lo que el día 29 se haga y diga no se le van a escapar a nadie.
En cuanto a primarias generales, en Toledo, con Page a la cabeza, parecen estar más bien con Patxi López. De hecho el alcalde de Toledo y jefe de los socialistas castellano-manchegos asistirá, invitado por su homólogo vasco, a unas jornadas a celebrar en Euskadi y en las que también participarán Felipe González, Rubalcaba, Susana Díaz o Elena Valenciano, entre otros.
Sin embargo, Barreda, mano derecha de Carmen Chacón en su cruzada contra Rubalcaba, encabeza el sector crítico al secretario general, que en el PSOE de Castilla-La mancha tiene sus principal cogollo en la provincia de Ciudad Real, donde también se apuesta por Eduardo Madina.
La división Rubalcaba-Chacón también caracterizó a los socialistas de Castilla-La Mancha en el Congreso Federal de 2012, en el que otro castellano-manchego, Máximo Díaz-Cano (La Solana, Ciudad Real), fue el portavoz de campaña de la exministra. Ahora ejerce como uno de los hombres de confianza de la presidenta andaluza y observa el tablero.
En cuanto a las primarias castellano-manchegas tendrán que esperar. Aunque aún no se ha decidido la fecha, parece claro que no serán cuando las del calendario oficial, en septiembre. Page estudiará las posibilidades para llevarlas a finales de año o principios de 2015. Fechas similares se aplicarán a las primarias que hay que celebrar en los municipios de más de 20.000 habitantes para elegir a los candidatos a sus Alcaldías. También serán a finales de año o principios del 2015.
Habrá que esperar un poco más también para saber si las primarias regionales son abiertas y con la participación de simpatizantes o solo con militantes.
De momento, lo único que se sabe es que Page mantendrá el suspense hasta el final.