El Grupo I de trabajo sobre patrimonio mundial ha elevado al Consejo Nacional de Patrimonio la propuesta para que la fiesta de «Pecados y Danzantes» de la localidad toledana de Camuñas forme parte del bien «Diablos danzantes del Corpus Christi» de Venezuela, que ya fue incluido en 2012, en la lista de patrimonio inmaterial de la Humanidad.
Así lo ha anunciado hoy la viceconsejera de Cultura y Deportes, Ana Muñoz, tras asistir a la reunión telemática que ha mantenido este grupo de trabajo.
En esta reunión, también han estado presentes la concejala de Cultura de Camuñas, Cecilia Redondo; y el presidente de la Asociación Cultural ‘Danzantes y Pecados’ de esta localidad, Gabriel Romero.
Confiados en que sea Patrimonio de la Humanidad
Muñoz ha explicado que “estamos en el buen camino, ya que el que se ha dado hoy es un paso importante en el objetivo de que esta fiesta pueda optar a ser reconocida como Patrimonio inmaterial de la Humanidad”.
Tanto desde el Gobierno regional como desde el Ayuntamiento de Camuñas y la Asociación cultural «Pecados y Danzantes» de este municipio, se muestran confiados en que, el Consejo de Patrimonio Histórico, a finales de este me tras la reunión de Zaragoza, «se pueda dar el visto bueno definitivo a esta iniciativa».
Ambas expresiones culturales presentan varias características en común. La primera de ellas es que se realizan en el marco de la veneración de la eucaristía; en segundo lugar, el uso de máscaras y vestimentas similares; y tercero, la representación del antagonismo entre el mal y el bien.
“Por ello, consideramos que la festividad de Camuñas, al igual que la de Venezuela, tiene los merecimientos para obtener este reconocimiento”, ha señalado Ana Muñoz.
Una fiesta de Interés Turístico Nacional
La viceconsejera ha recordado que la fiesta de ‘Pecados y Danzantes’ de Camuñas está declarada como Bien de Interés Cultural de Castilla-La Mancha desde 2017 y, además, está declarada de Interés Turístico Nacional.
“Es uno de los rituales más interesantes de nuestro país. Un ritual del que tenemos constancia desde principios del siglo XVI”, ha recordado.