¿Se puede dar que un artesano de la imaginería religiosa -retablista de iglesia- de un pueblo toledano, entusiasta de las peregrinaciones, eligiera precisamente el pasado 4 de octubre, Día de San Francisco de Asís, para completar la primera peregrinación franciscana en Toledo capital?
Pues claro que sí. El firmante de la gesta, 24 horas pedaleando con salida y llegada en el Cerro de los Palos, con todos los sellos posibles, es Juan Luis García García-Muro, de 61 años y de Polán (Toledo), quien cuenta de manera entusiasta su gesta, a bordo de su bici, día y noche, portando sus viandas y recibiendo el apoyo de todo el que quisiera, sellando sus pasos por el camino en todos los lugares que se aviniesen a satisfacerle (el Cigarral de las Mercedes, la gasolinera de la Olivilla y la Policía Local, cada hora u hora y pico…).
«Los franciscanos son muy buena gente»
Este polaneco de pro considera de forma muy positiva a los frailes franciscanos: «Son muy buena gente, por lo que he podido ver».
Decidió hacer la peregrinación en Toledo capital, 24 horas en bicicleta, sin coche de apoyo. «Arrastré mis cubiertas, mis bocadillos, como hago siempre en mis peregrinaciones», empieza a relatar.
Desde el Cerro de los Palos, sobre las 8:45 horas del 4 de octubre (tras llegar desde Polán), se bajó a los Cigarrales, de ahí al Puente de San Martín y a La Bastida, con la cartilla hecha para que se la fueran sellando.
Se la sellaban en las gasolineras…
Se la sellaban en las gasolineras, en el Cigarral de las Mercedes… Ya a la noche, con las gasolineras cerradas, acordó que se la sellasen en la sede de la Policía Local (lo hizo varias veces allí, ya que durante la noche era lo único que había abierto), tras lo cual volvió a la ruta.
Una vez que la acabó, fue a escuchar misa en el Convento de Santa Clara; después los franciscanos le sellaron la cartilla en San Juan de los Reyes (también se lo sellaron al empezar) y regresó a Polán. Antes, el penúltimo sello fue en el Cigarral de las Mercedes, a las 8:45 horas del 5 de octubre, antes de que los frailes oficializaran el final de la peregrinación.
«Uno me acompañó dos o tres vueltas»
Dice este singular peregrino que él no tiene constancia de que nadie haya hecho algo parecido en favor de los frailes franciscanos.
«Uno me acompañó dos o tres vueltas, Carlos, de Cobisa; Fernando Lleida (director propietario del Cigarral de las Mercedes), me sacó una tortilla para que comiera… A las 23:30 horas, en La Bastida, el mismo Fernando me dio de cenar», añade.
«La noche se le hacía muy larga. Era difícil seguir la línea…», rememora el peregrino toledano, quien señala que su «beneficio es espiritual para la Orden», ya que, «como siempre», nunca le ha «movido el dinero».
Este artesano polaneco y peregrino apasionado calcula que se hizo casi 170 kilómetros, con subidas y bajadas. «La forma física y la forma sicológica son fundamentales, porque si no, uno podría bajarse de la bicicleta», constata.
Gestas anteriores
Juan Luis García refresca sus gestas anteriores en forma de peregrinaciones: a Santiago en 2011; a Roma en 2012; a Jerusalén en 2015; y estas tres ciudades juntas en 2018, el mismo año en que también peregrinó a Guadalupe, destino que repitió en 2019. También en 2019 dio la Vuelta a España durante 20 días, unificando todos los Caminos de Santiago.
«Y en 2013 tengo pensado bajar a Jerusalén»,… avanza.
Hace 20 días tuvo que cerrar la empresa
En el plano profesional, Juan Luis García García-Muro hace retablos de iglesia: carrozas, pasos… Pero atraviesa problemas. Hace 20 días tuvo que cerrar. «Las hermandades, las cofradías, las parroquias… andan muy mal. Al tener una empresa… los gastos son cada vez mayores y los ingresos, cero. Salen muy pocos pasos nuevos. Los autónomos estamos olvidados de la mano de Dios», se lamenta.