La consejera de Agricultura, María Luisa Soriano, ha recriminado a la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en Castilla-La Mancha su decisión de iniciar una campaña de protesta para pedir la regularización de los pozos del Alto Guadiana y no lo hiciera antes cuando gobernaba el PSOE.
En rueda de prensa en Ciudad Real, la consejera de Agricultura ha lamentado que UPA no llevara a cabo esta protesta cuando el Gobierno del PSOE prometió como solución a la regularización de los pozos el Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), un plan con el que, ha dicho, «ni vino agua, ni vino dinero».
A preguntas de los periodistas sobre las sanciones que acaban de recibir 1.100 agricultores del Alto Guadiana, ha comentado que «son sanciones que proceden del Gobierno anterior y que los funcionarios están obligados a tramitar».
El secretario general de UPA, Julián Morcillo, denunció ayer que la organización agraria iniciaría una campaña de protestas para llamar la atención sobre la pasividad que está demostrando la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) a la hora de tramitar los expedientes de los pozos que aún están pendientes de ser regularizados.
Además, esta organización lamentó la nueva campaña de sanciones impulsada por la CHG, que durante las navidades envío 1.100 sanciones a agricultores de la región.
Algunas de estas sanciones han llegado por la vía penal, después de que la fiscalía haya decidido abrir diligencias contra 27 agricultores de la región.