«Me resulta vomitivo que haya insultos tan obscenos«. Así de contundente se ha mostrado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, sobre los insultos que recibió ayer la ministra de Igualdad, Irene Montero, por parte de la parlamentaria de Vox, Carla Toscano.
Page ha ido más allá y ha alertado de que «la violencia verbal» puede escalar y «normalmente termina en violencia no verbal».
«Ojo, que es el paso previo a que las cosas se compliquen», ha añadido y se ha preguntado que si «en este país» se va a poder debatir «sin necesidad de usar los puños», puesto que «de eso se trata la democracia y la civilización».
Unas declaraciones que el presidente regional ha realizado en la inauguración de la residencia de mayores de Olías del Rey.
La diputada Toscano primero llamó a la ministra Montero «libertadora de violadores», para después decirle «lo único que ha estudiado en profundidad es a Pablo Iglesias«. Montero, por su parte, contestó a la bancada de Vox diciendo que «a estos fascistas se les para los pies con derechos«.