Gabriel es un niño de 12 de años de Talavera, aquejado de un síndrome polimalformativo con múltiples afectaciones, que necesita toda la ayuda posible para cubrir el coste de unos audífonos especiales.
Gabriel es un alumno del colegio de educación especial Bios, de la Ciudad de la Cerámica, al que se puede ayudar llevando tapones a su centro educativo, a fin de mejorar su calidad de vida.
En concreto, precisa de 10 toneladas de estos tapones para que la ayuda se pueda materializar.
La iniciativa «Tapones para una vida», «¡Gabriel necesita tus tapones!«, de la Fundación Seur, que cuenta con la colaboración de Acteco, consiste en el reciclaje de los tapones de plásticos para ayudar a niños y niñas, ayudando a financiarles tratamientos médicos y ortopédicos que no están cubiertos por la seguridad social, o solo en parte.
Además, el reciclaje de los tapones de plástico combate la emisión de los gases CO2.
Talavera y su cerámica ya tienen la primera marca artesana registrada para venderse al mundo