La directora general de Familia, Menores y Promoción Social de Gobierno regional, Silvia Valmaña, ha subrayado que los puntos de encuentro familiar «son un recurso fundamental» con el que cuentan las familias y la administración de Justicia para la resolución de conflictos en el seno familiar y el cumplimiento de las resoluciones judiciales.
Según informa la Junta en nota de prensa, la directora general ha señalado que en los dos últimos años 1.835 familias han sido atendidas por este programa en Castilla-La Mancha, 976 en 2012 y 859 el pasado ejercicio. Valmaña ha incidido en la importancia de contar con «un espacio neutral y acogedor donde facilitar el contacto del menor con el progenitor o tutor y garantizar así la normalización de las relaciones familiares en casos de conflicto».
Los puntos de encuentro de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales, ha explicado la directora general, tienen como objetivo fundamental colaborar con la administración de Justicia en el adecuado cumplimiento de las resoluciones judiciales y facilitar a las familias un contexto que contribuya a solucionar problemas en el seno familiar.
La red de puntos de encuentro de Castilla-La Mancha cuenta con un dispositivo de estas características en cada capital de provincia más Talavera. Los puntos de Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Toledo y Talavera los gestiona la entidad Colabora, y el de Ciudad Real Amifam CLM.
Valmaña ha asegurado que la apuesta del Gobierno regional por la familia y los menores queda patente con las acciones que contempla el Programa de Atención a la Familia, «cuyo objetivo principal es la prevención y la intervención en situaciones contrarias al bienestar social», ha explicado.
La directora general ha hecho estas declaraciones durante la visita realizada al Punto de Encuentro Familiar de Guadalajara. Valmaña ha señalado que el pasado año en Guadalajara un total de 157 familias y 233 niños utilizaron este recurso, mientras que en 2012 fueron 141 familias y 213 menores.
Finalmente, la dirigente regional ha explicado que además de facilitar el régimen de visitas en un lugar físico neutral, gracias a este recurso «se garantiza el derecho fundamental de los hijos a relacionarse con ambos progenitores y con su familia». Este recurso sirve asimismo para ayudar a los padres para que puedan tener una relación normalizada respecto de sus hijos, independientemente de su ruptura como pareja, y previenen situaciones de violencia en relación con el cumplimiento del régimen de visitas.