domingo, 24 de noviembre de 2024
Adelanto de la Entrevista Irreverente a Alberto Romero, pintor y escultor 06/03/2014junio 9th, 2017

El pintor y escultor toledano Alberto Romero, junto a su escultura de El Greco en Toledo, justo al lado de las Cortes de Castilla-La Mancha.

Tiene un cabreo de aúpa porque es el autor de la única escultura sobre El Greco que hay en la ciudad de Toledo y no ha sido incluida en ninguno de los fastos, itinerarios o demás que se van a mostrar a todos aquellos miles y miles de visitantes que lleguen a la capital de Castilla-La Mancha durante el presente año, 2014, precisamente el del cuarto centenario del fallecimiento del que fuera, y es, genial pintor. Aunque todavía están a tiempo de solucionarlo… Porque él va a seguir duro en el empeño. Sí, sí…


Verán, verán lo que dice sobre el particular nuestro protagonista, esta semana, de la Entrevista Irreverente de encastillalamancha.es, el pintor y escultor Alberto Romero, quien en estos momentos está completamente obsesionado con la duquesa de Alba, doña Cayetana, «sueño con ella y mi mujer lo sabe». No es un farol, no, puesto que la conoce en persona e incluso le ha pintado por activa y por pasiva e incluso le ha dedicado una colección completa que a ella le fascinó, que todo hay que decirlo. Es, ademas, y ojo a esto que nadie lo ha conseguido hasta el momento, el único artista que cuenta con el permiso legal de la Casa de Alba para la utilización de su imagen. Ni Goya, vamos…

Y es curioso cómo se tuvo que colar en un acto en Toledo, donde la duquesa participaba como invitada de excepción, para presentarse personalmente. Un político le dijo que se pusiera a su lado, que no se separara y…

Ja, ja, ja… Alberto se considera un artista ordenado dentro del «desorden establecido» que hay en ese mundo. Para que vean que se sale de la norma que incluso llegó a tener un perro schnauzer gigante, se lo regaló su esposa, al que llevaba cada dos por tres a una peluquería de Madrid exclusiva para perros schnauzer y lo presentaba a concursos. Vamos, que cuando salía del salón de belleza el animal se recreaba y se pasaba un buen rato oliéndose por las colonias y los geles que le habían impregnado. «Demasiado pijada, sí, pero era la única pijada que tenía», afirma con una sonrisa.

Le aterrorizan el paro y el terrorismo, presume de que nunca… «¡Nunca, jamás!», mañana sabrán a qué nos referimos cuando publiquemos, íntegra, la Entrevista Irreverente, y el lugar más raro donde ha practicado sexo… Ja, ja, ja… ¡Esta sí que es buena! Les pongo en situación, para que vayan dándole a la imaginación: fue en Bangkok, hace ya unos años y… «Parecía que estabas flotando en una nube». ¿Qué será? Pues eso, que «parecía que…».

Ahhhhhh… Ahora está obsesionado en que se quiere marchar de Toledo y no porque esté a disgusto en la ciudad, sino porque tiene un pequeño mosqueo con la vida, que seguro que será pasajero. Alberto aprendió con los mejores y lleva el arte en las venas. Todo comenzó cuando con 12 o 13 años se rompió una pierna, cogió una bola de barro, se puso a hacer figuritas y…

Y además le encanta la casquería. Entiéndanme bien: las manitas de cerdo, los sesos, el hígado, las criadillas… Ja, ja, ja…

¡¡¡Eso sí que es arte!!!

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