Espectacular fue el desfile del Día del Ofertorio en Herencia (Ciudad Real), en un Carnaval que es Fiesta de Interés Turístico Regional, pero que, por lo visto, bien merece una más alta categoria. Desfilaron 40 grupos de toda la región, más de 2.500 participantes a lo largo de seis horas, animados por miles de herencianos y visitantes a lo largo del recorrido.
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Acudieron al desfile el alcalde, Jesús Fernández, y el concejal de Festejos, Sergio García-Navas, junto al resto de la Corporación municipal, y como invitados varios alcaldes, entre ellos el de Toledo y senador, Emiliano García Page, a quien acompañaban el vicepresidente de la Diputación de Ciudad Real, José Fernando Sánchez Bódalo, y el secretario provincial socialista José Manuel Caballero.
Tras el tradicional «puñao» ante el Ayuntamiento, el desfile arrancó siguiendo al singular Perlé, a los gigantes y cabezudos, a las jinetas, al pendón de las animas (cuyos miembros hicieron sonar sus campanillas) y a la agrupación musical de la localidad. Seguían a la comitiva dos representantes de cada una de las agrupaciones participantes en el desfile, que llevaban sus presentes a la tribuna principal para ofrecerlos por una causa solidaria.
El desfile lo abrió la estudiantina local El Parnaso Manchego, con su gracia y veteranía, a la que siguieron las charangas La Garrota (Daimiel), de payasos, y el «comando Pizzas» (Herencia), con «Mozart». Era la antesala de lo que estaba por venir, un concurso como no se recuerda, con miles de desfilantes, a cual mejor vestido y bailón.
Entre las 19 chirigotas, comparsas y peñas, hubo una gran variedad de tipos: cisnes, mensajes apocalípticos del fin del mundo (que contrastaban con el ambiente de juerga), esquimales con sus trineos tirados por perros, aztecas bellamente maquillados y ataviados, «ladyes blacks», vivaldis con violines azules primaverales, vikingos, locos humeantes llegados de Puertollano, africanos de fantasía, moscas y moscones, marcianos, mágicos y fantásticos bartoleros, africanos perdidos en la tribu y todos los tipos posibles de los años 70 (hippies, tupés, chicas yeyé, etc.)
En total, 40 grupos procedentes de 24 localidades de las provincias de Cuenca, Toledo, Ávila y Ciudad Real: concretamente de Daimiel, Cinco Casas, Alcázar de San Juan, Arenas de San Juan, Manzanares, Llanos del Caudillo, Puerto Lápice, El Robledo, Tomelloso, Porzuna, Puertollano, Fuente del Fresno, Las Labores, Campo de Criptana, Villarrubia de los Ojos, Villarta de San Juan, Villafranca de los Caballeros, Membrilla, Socuéllamos, Las Ventas con Peña Aguilera, Las Mesas, Lillo, Madridejos, Mota del Cuervo y Herencia.