El presidente en funciones de Asaja Castilla-La Mancha, José María Fresneda, ha valorado positivamente la aprobación del caudal ecológico del Tajo, o «caudal mínimo», como ha preferido llamarlo, pero ha criticado que los planes hidrológicos siguen recortando agua para regar.
«Hay muchas reivindicaciones recogidas en los planes, pero se han dejado lo esencial, y es que cada plan hidrológico recorta agua para regar», ha lamentado, asegurando que «si en Castilla-La Mancha no se riega, será una ruina para todos».
En este sentido, Fresneda ha querido felicitar al Gobierno regional, así como al conjunto de la sociedad, por lograr la aprobación del caudal «mínimo» del Tajo, una medida con la que «contaban todos los ríos de Europa menos este», y ha negado que el problema de la agricultura sea el debate «trasvase si, trasvase no», reprochando que se priorice el aspecto medioambiental a la riqueza que se genera.
«Medidas que recortan agua para regadío»
«La clase política está montando todo un escenario con el agua, pero lo único que han aprobado en los planes hidrológicos son medidas que atentan contra el sistema productivo, porque recortan el agua para el regadío», ha dicho.
Del mismo lado, el presidente en funciones de los agricultores ha puesto de ejemplo el sistema de Portugal. «Yo quiero lo que hay en el Guadiana en el Algarve, agua almacenada por un tubo con una estructura enorme para atender el regadío de medio país, pero aquí no, aquí el componente de este Gobierno atenta contra el modelo productivo«, ha reiterado.
Fresneda también ha pedido un plan de cultivos, que recoja el agua de la que se dispone y a qué deben atenerse los agricultores.
Una propuesta para modificar los planes hidrológicos
Así, ha anunciado una propuesta que elaborarán desde la asociación y presentarán a todos los partidos políticos antes de las elecciones de mayo, con una serie de medidas que contemplen las carencias del campo, con el objetivo de que se modifiquen los planes hidrológicos en el plazo de un año y medio.
Por último, ha finalizado recordando de nuevo la importancia del caudal «mínimo» del Tajo, pero pidiendo al Ejecutivo regional «que se apriete los machos» porque, asegura, «nos han quitado mucho agua para regar en todas las cuencas».