Alumnos de la Facultad de Medicina de Ciudad Real se han concentrado este viernes para protestar por la decisión del Vicerrectorado de Ciencias de la Salud de mandar a 40 alumnos, «en contra de su voluntad», han dicho, a continuar su formación académica al Hospital Universitario de Toledo.
Los alumnos que se han concentrado a las puertas de la facultad han leído un manifiesto en que han dejado claro que se les «ha acabado la paciencia» ante la decisión de la UCLM de imponerles un itinerario que les llevaría a desplazarse desde Ciudad Real a Toledo.
Elena Pérez, alumna de segundo curso de Medicina, ha asegurado que «la paciencia se nos ha acabado tras un año y medio solicitando que se nos escuche» y cuando se les ha admitido que «las cosas se han hecho mal, pero no ponen soluciones».
Pérez ha recordado que este problema surgió en el inicio de la carrera cuando, al realizar la preinscripción en el grado, marcaron una casilla, con escasa información y ausencia de normativa, de tener que cursar tercero en el Hospital de Toledo.
En contra de irse a 120 kilómetros de su actual facultad
La alumna ha señalado que no están «en contra de este proyecto, la gente que quiera irse tiene derecho a ello, pero estamos en contra de que se mande a gente que no quiere a estudiar a 120 o 260 kilómetros de su facultad actual, en base a una elección hecha a dos años vista y sin información suficiente».
En este sentido, ha explicado que el vicerrectorado ha sido conocedor del rechazo y deseo de cambio de itinerario de estas personas desde hace un año y medio, sin que en todo este tiempo haya dado soluciones reales al problema y sin abordarlo desde la raíz.
Han añadido los alumnos que esta situación no es exclusiva del alumnado de segundo de Ciudad Real, puesto que en la misma situación se encuentran 35 estudiantes de segundo de Albacete y alumnos de primero de ambas facultades.
La decana de la Facultad, Inmaculada Ballesteros, ha asegurado que entiende que los alumnos estén nerviosos por esta situación y les ha mostrado su apoyo.
Supondrá un perjuicio económico
Ballesteros ha reconocido que para muchos de ellos desplazarse a Toledo supondrá un perjuicio económico, y ha lamentado que esta situación esté provocando que en vez de estar centrados en estar estudiando y aprender, estén pensando en su futuro.
La decana ha reconocido que desde el decanato están prestando toda su ayuda para intentar buscar una solución de su agrado y que el vicerrectorado está trabajando en esa misma línea.
Por su parte, el rector de la UCLM, Julián Garde, a preguntas de los medios de comunicación, ha recordado que a los alumnos, cuando realizaron la preinscripción, se les hizo saber que «una parte reducida» a partir del tercer año deberían continuar sus estudios en el Hospital de Toledo.
El rector, convencido de que en tres años estarán contentos
El objetivo de esta medida, ha señalado, no es otra que «aprovechar un sistema de salud amplio» como el que tiene Castilla-La Mancha.
Y ha recordado que esto es algo que hacen otras comunidades autónomas como por ejemplo el País Vasco, que tiene una única facultad cuyos alumnos, a partir del tercer curso, se distribuyen por los hospitales de las cuatro provincias.
El fin final, ha reflexionado, «es darles una formación mejor» evitando la saturación de los hospitales en los que se forman.
«Entendemos la reivindicaciones» pero, ha dicho, «es un tema resuelto» y ha señalado: «estoy convencido, como pasa con otras muchas cosas de la vida, de que dentro de tres años los alumnos estarán contentos de estudiar en un hospital como el de Toledo».