La Audiencia Provincial de Cuenca ha desestimado la querella interpuesta por el sindicato CSIF contra el alcalde de Cuenca, Juan Ávila, por desobediencia al no haber ejecutado la sentencia de la Oferta Pública de Empleo (OPE) del año 2006.
La querella se hacía extensiva a la interventora municipal, María José Torres, por «falsedad documental», según ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.
El consistorio solicitó no tener que ejecutar la sentencia argumentando que «supondría el despido de trabajadores municipales, un caos organizativo y el pago de 26 millones de euros en indemnizaciones».
El auto de la Audiencia Provincial establece que «la Ley contempla la posibilidad de plantear la inejecución de una sentencia por concurrir causas de imposibilidad material o legal», aunque este planteamiento «ha de ser valorado, y por supuesto aceptado, por el Tribunal que la requirió».
En este sentido, el auto de la Audiencia recuerda que el Ayuntamiento «ya presentó el incidente de inejecución» y considera que «tal y como vienen los hechos formulados o afirmados en la querella no son delictivos», y que «es totalmente improcedente» reclamar a la Jurisdicción Penal sobre la falsedad documental.
Preguntado por esta decisión judicial, contra la que no cabe recurso ordinario, el alcalde de Cuenca ha señalado que la postura del CSIF es «surrealista» y que ha intentando «criminalizar este asunto».
Asimismo, Juan Ávila ha recordado que el juez que dictó la sentencia sobre la OPE 2006 ha aceptado el recurso de inejecución del Ayuntamiento, pese a lo cual CSIF presentó un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla -La Mancha que aún se tiene que resolver.
«Es surrealista: el CSIF dice que desobedezco a un juez. Pues bien, el juez que tiene que pronunciarse no solamente no se siente desobedecido, sino que sobre la cuestión de fondo le da razón al Ayuntamiento y dice que efectivamente la defensa del interés general es suficiente razón para dejar las cosas como están y no cumplir la sentencia», ha señalado Ávila, que ha añadido que «pese a lo cual presentaron recurso ante el Tribunal Superior de Justicia».
El alcalde ha lamentado que sea precisamente un sindicato el que esté llevando ante los tribunales a un Ayuntamiento por no ejecutar la sentencia «e intentar mantener todos los puestos de trabajo».