Representantes de CCOO y UGT en Albacete han alertado de una reducción del personal de vigilancia que presta servicio en el Centro de Menores Albaidel de Albacete, que pasará de tener 20 vigilantes a 15 según el pliego de condiciones del nuevo contrato.
La denuncia la han hecho en rueda de prensa el secretario territorial de UGT Albacete, Javier González, la secretaria de la Federación de Servicios ala Ciudadanía de CCOO, Carmen Juste, y el delegado sindical de los vigilantes del centro, José María Muñoz.
Javier González ha asegurado que los planes de la Junta suponen crear una «situación de inseguridad» en el centro, con más riesgo para los propios menores y para todo el personal que trabaja en Albaidel, pese a que «los menores internos necesitan más personal, como ha dicho el Defensor del Pueblo en el último informe».
Los convocantes piden a la Junta que corrija el pliego de condiciones «para evitar desgracias», ha dicho González, que ha avanzado que los trabajadores han pedido una entrevista con el delegado de la Consejería de Asuntos Sociales.
Por su parte, Carmen Juste, de Comisiones Obreras, ha denunciado la «presión» con la que trabaja todo el personal ante menores con problemas, de modo que «ahora mismo hay cinco técnicos de Atención al Menor que están de baja».
El delegado sindical de los vigilantes de Albaidel, José María Muñoz, ha dicho que, como recomienda el Defensor, lo que necesita el centro de menores es más personal, por la «agresividad» a la que a veces tienen que hacer frente, y ha asegurado que en el último año «los vigilantes hemos tenido más de 300 intervenciones», a veces «salvando la vida de un menor».
Muñoz ha aludido a un informe del Alto Comisionado para los Derechos del Menor que «dice que en reducciones y traslados de un menor debe haber cinco efectivos», cosa que no se cumple y que «pone en riesgo la seguridad».
En el centro de menores albaceteño hay ahora mismo 25 menores internos, con edades «la mayoría de entre 17 y 19 años», ha explicado el delegado sindical.
La Defensora del Pueblo, que visitó Albaidel el pasado diciembre tras la muerte de un menor que se suicidó en septiembre, aconsejó a la Junta «el incremento de la plantilla de personal», para garantizar la atención correcta a los internos.