La diputada del PSOE Blanca Fernández ha cuestionado hoy los dobles cargos, en instituciones públicas y en el partido, del presidente de las Cortes regionales, Vicente Tirado, y del delegado del Gobierno, Jesús Labrador, y les ha acusado de ser «los mayores antisistemas de Castilla-La Mancha».
Fernández ha criticado en rueda de prensa el comportamiento en el pleno del Parlamento autonómico de ayer de Tirado, que tras el enfrentamiento entre las dos bancadas expulsó al diputado socialista José Molina.
Y también de Labrador, después de que la Delegación del Gobierno haya iniciado dos expedientes sancionadores contra el alcalde de Alcázar de San Juan (Ciudad Real), José Sánchez Bódalo, y la diputada socialista y concejala de este municipio Rosa Melchor como promotores de la protesta ciudadana contra el proceso de privatización de la empresa municipal de aguas.
A juicio de la diputada socialista, es «absolutamente lamentable» que la «segunda y tercera autoridad de Castilla-La Mancha», Labrador y Tirado, respectivamente, actúen más como secretario de Acción Electoral del PP, en el primer caso, y como secretario general del partido en la región, en el segundo, que como representantes públicos.
En el caso de los hechos ocurridos en el pleno de ayer, Fernández ha denunciado que los diputados socialistas fueron «insultados sistemáticamente» con un «afán provocador por parte» del consejero portavoz de la Junta, Leandro Esteban, y del portavoz del grupo popular, Francisco Cañizares.
«Se nos dijo de todo, desde que somos indignos para dedicarnos a la política hasta que vivimos del cuento, que somos vagos, que somos torpes, y por enésima vez no tuvimos el amparo del presidente de las Cortes», ha lamentado.
La riña se produjo durante el debate general presentado por el grupo parlamentario popular sobre los efectos para Castilla-La Mancha de la sentencia del Tribunal Constitucional que rechaza el recurso presentado por el PSOE contra la retirada de los salarios fijos a los diputados autonómicos.
En este sentido, la diputada socialista ha dicho que lo que pretendía el PP era «tapar» que la que «lanza estas medidas de austeridad, Cospedal, no las propone para el resto de España y que es una persona que no ha dedicado su vida a la política sin percibir sueldo o sobresueldo».
Fernández ha subrayado, además, que su partido no defiende la dedicación exclusiva ni los sueldos sino «la democracia».
En el caso de los hechos de Alcázar, ha considerado, en la misma línea, que el delegado del Gobierno «se está dedicando a hacer un uso partidista de las instituciones» y ha aseverado que las manifestaciones ciudadanas de Alcázar «cuentan con todo el apoyo del PSOE» porque son «libres, permisibles y deseables en democracia».
Por otra parte, se ha referido a la aprobación con el apoyo del PP y el voto en contra de la oposición en el pleno del Congreso de los Diputados de ayer de la reforma del Estatuto de Autonomía para reducir casi a la mitad el número de parlamentarios autonómicos y ha avisado de que supondrá «un pucherazo electoral».
«Es un pucherazo que mete en un tremendo lío a Rajoy porque si se aplicara en Cataluña, Navarra o Euskadi, el PP no tendría representación ninguna. ¿Y esto sería lógico, sería democrático?», se ha preguntado Fernández.