La consejera de Agricultura, María Luisa Soriano, ha afirmado que la futura Ley de Caza de Castilla-La Mancha mantiene el «equilibrio» entre el respeto a las especies y la conservación de la naturaleza y el desarrollo de una actividad económica generadora de empleo y con alto potencial turístico.
En una nota de prensa, Soriano ha destacado las principales ventajas de la futura ley, que además de proteger el medio ambiente y las especies «profesionaliza» los planes de ordenación de la caza, simplifica trámites administrativos, elimina burocracia y establece criterios «más realistas y flexibles» para ordenar la actividad.
De esta forma ha valorado la consejera el anteproyecto de Ley de Caza de Castilla-La Mancha que ha aprobado esta semana el Consejo de Gobierno y que ahora pasa a su fase de información pública al mismo tiempo que se analizará en el Consejo Regional de Caza y en el Consejo Asesor de Medio Ambiente.
Soriano ha explicado que, una vez introducidas las alegaciones que se estimen, se elevará nuevamente al Consejo de Gobierno, que solicitará dictamen al Consejo Consultivo, tras el cual volverá al Consejo de Gobierno para su aprobación como proyecto de ley y se remitirá a las Cortes Regionales para su discusión parlamentaria, previsiblemente en el último cuatrimestre del año.
Entre las novedades que recoge el anteproyecto de Ley de Caza, la consejera ha reseñado el impulso a los planes de ordenación cinegética, la creación de la figura de titulares profesionales cinegéticos y una forma más rápida para la creación, ampliación o segregación de cotos de caza.
Los terrenos cinegéticos quedan reducidos a dos: Cotos de Caza y Zonas Colectivas de Caza, lo que simplifica su denominación, según la Junta.
En cuanto a la conservación de las especies, la Ley contempla la puesta en marcha de planes de conservación del patrimonio genético de las especies más sensibles para no perder la pureza genética de las más importantes, como la perdiz roja o el ciervo ibérico.
Soriano ha recordado diversas medidas adoptadas esta legislatura, como las ayudas de 500.000 euros para potenciar el aprovechamiento sostenible de los cotos de caza y el turismo cinegético, la simplificación en la expedición de las licencias de caza y la promoción de agrupaciones de empresas del sector que permitan concentrar la oferta de servicios al cazador.
Otra medida ha sido el impulso a la ‘licencia única’ de caza entre regiones limítrofes, en la que ya hay un acuerdo con las comunidades d Extremadura, Castilla y León y Madrid para ponerla en marcha.