El Hospital General Universitario de Ciudad Real, centro dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), ha puesto en marcha una consulta de Enfermería especializada en cuidados de pacientes ostomizados.
La ostomía es una solución quirúrgica en la que se practica un orificio o estoma para dar salida artificial a un órgano en un punto diferente a su salida natural, ha informado el Sescam en un comunicado.
En el último año, la actividad de ostomías aumentó en la Gerencia de Ciudad Real en 15 personas, pasando de 64 pacientes en 2012 a 79 en 2013.
La consulta de estomaterapia permitirá a estos pacientes mejorar su calidad de vida, ya que podrán resolver sus problemas de manera directa con un especialista que servirá como referencia para plantear sus dudas o las complicaciones tardías relacionadas con el estoma.
El objetivo del nuevo dispositivo, que comienza a funcionar esta semana, es promover la educación integral del paciente antes y después de la intervención quirúrgica que implica la realización de un estoma, a través de un completo programa de cuidados enfermeros que ofrezca continuidad durante todo el proceso.
Los pacientes a los que se les realiza una ostomía como única alternativa para tratar su enfermedad se enfrentan en un breve plazo de tiempo a un diagnóstico de gravedad, a una intervención quirúrgica con ingreso hospitalario y al inicio de su convivencia con una nueva situación física que se concibe como especialmente traumática, explica Olga Jorreto, enfermera responsable de la consulta de Estomaterapia.
Ser portador de una ostomía puede originar en el paciente problemas físicos, emocionales, sociales y dificultades en el manejo técnico del estoma, ya que deben aprender nuevos hábitos de higiene o desarrollar habilidades para el cambio del dispositivo que resuelva posibles molestias en la adherencia a la piel.
En este sentido, desde la consulta se colaborará con el paciente en el cuidado del estoma hasta lograr un autocuidado que de confianza y seguridad al portador, facilitando su rehabilitación e integración en una rutina normalizada.
De esta manera, se reducirán las estancias por complicaciones de los pacientes ostomizados y el número de reingresos, así como se establecen circuitos de referencia con personal especialista en coordinación con los centros de Atención Primaria.