La Guardia Civil ha desarticulado una organización acusada de realizar ciberestafar a unas 100 empresas de todo el mundo. Hay 25 personas detenidas en toda España, entre ellas en Hellín (Albacete) y Seseña (Toledo).
La red estaba articulada en torno a una empresa matriz principal situada en Lagos (Nigeria) y también desde Estados Unidos, Holanda, Irlanda o Reino Unido. Los ataques informáticos estaban dirigidos a compañías de todo el mundo. Algunas de sus víctimas, según la Guardia Civil, son empresas de Alemania, Australia, Brasil, Chipre, Italia, Japón o Vietnam.
Los agentes han podido demostrar fraudes por valor de dos millones de euros, aunque estiman que la cantidad que han podido estafar está en torno a los cinco millones de euros, a unas 100 compañías de todo el mundo. La investigación ha llevado a bloquear 137 cuentas bancarias y se han intervenido 42.700 euros en efectivo.
A través de ataques informáticos como el «Man in the middle» o el fraude del CEO
El «modus operandi» de los estafadores era usar ataques informáticos para acceder a los datos de las víctimas. Uno de ellos es el conocido como el «Man in the middle», colarse en las conversaciones entre proveedor y cliente para desviar los fondos de los pagos a sus propias cuentas.
A los detenidos e investigados se les imputan los delitos de estafa tecnológica, blanqueo de capitales, descubrimiento y revelación de secretos, falsificación de documentos, usurpación de identidad, alzamiento de bienes, contra la Hacienda Pública, de insolvencia punible y constitución de organización criminal.