El Colegio de Ingenieros de Montes de Castilla-La Mancha ha considerado que «un buen plan de gestión de caza menor, desarrollado por técnicos expertos, sería el medio más efectivo» para controlar la plaga de conejos sin afectar a su equilibrio de conservación.
En una nota de prensa remitida a los medios, el decano del colegio, Ángel Roldán Martínez, ha asegurado que «acabar con los conejos, como proponen los agricultores, no es la solución a un problema que se sabe puntual».
Por eso, los ingenieros de montes han pedido una intervención de la Administración «que debe de tener una base técnica de actuación que tenga en cuenta la complejidad de la situación derivada de los distintos factores que concurren en este problema, que no es nuevo y en el que ya hay experiencia de muchos años».
En este contexto, han considerado «fundamental» que la futura Ley de Caza de Castilla-La Mancha «contemple la profesionalización de la gestión cinegética» y así, han adelantado que presentarán alegaciones para «mejorar la regulación de un sector económico tan importante como es el aprovechamiento cinegético, y que influye tan directamente en otro de los sectores económicos más importantes, la agricultura».
«Un buen Plan de Ordenación de la Caza es un instrumento básico para que problemas como éste no se repitan en el futuro o al menos se minimicen todo lo posible» ha asegurado el presidente del colegio de Ingenieros de Montes.
Los ingenieros han considerado que, en el caso de plagas como la actual, también es posible que «la colonia sufra una de las enfermedades propias de su especie, que actúan como auténticos depredadores, y que contribuirían a la autorregulación de la especie».