La consejera de Agricultura de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, ha asegurado que el Gobierno regional está «absolutamente implicado» en el proceso de modernización de la industria agroalimentaria, a la que se han concedido 155 millones de euros en ayudas convocadas durante la presente legislatura.
Para Soriano, que ha visitado en Villarrubio (Cuenca) la empresa Harinas Manzanares, el objetivo de este tipo de ayudas es que las industrias del sector mejoren su competitividad.
En este sentido, la consejera ha afirmado que los 155 millones que ha habilitado el Ejecutivo regional van a permitir llevar a cabo unas inversiones globales -con fondos públicos y privados- de más de 600 millones de euros, así como la creación de alrededor de 1.400 nuevos puestos de trabajo.
«Estas cifras evidencian que el sector agroalimentario tiene una importancia estratégica para nuestra región, ya que es un motor económico y de creación de empleo para la economía de muchas zonas rurales», ha aseverado.
Además, la consejera ha resaltado el potencial de crecimiento del sector en el exterior que, en los últimos años, «ha dado un paso de gigante en la internacionalización de nuestras cooperativas y empresas agroalimentarias, que han batido récords históricos en exportaciones».
Así, ha recordado que la industria alimentaria nacional está inmersa en un plan estratégico para intentar duplicar las exportaciones en el período 2014-2020, proyecto en el que se ha mostrado convencida de que Castilla-La Mancha «va a tener un importante protagonismo».