Erik es el nombre del protagonista de esta historia, un recién nacido al que le pudieron las ganas por llegar al mundo. Esto fue lo que ocurrió el pasado lunes, 17 de abril, cuando su madre y su padre tuvieron que parar en un área de servicio situada en Maqueda (Toledo), a mitad de camino entre Escalona, su lugar de origen, y la capital regional.
Allí, Tamara dio a luz en el coche familiar ante la mirada del padre del bebe, Sergio, y su hermano pequeño, tal y como informa Informativos La Sexta.
Tan solo 15 kilómetros, pero… Erik no pudo esperar
Tamara y Sergio se dirigían en su coche desde Escalona hacia Toledo capital, 15 kilómetros los separaban, pero para Erik eran demasiados. El bebe decidió adelantarse y el padre tuvo que detener el coche en una estación de servicio de Maqueda. «Se le ha salido, con el otro nos dio tiempo», explicaba Sergio.
Por suerte, en la cafetería de área de servicio había una enfermera que ayudo a la pareja en el parto. Con el coche convertido en un paritorio improvisado, el pequeño Erik nació sin complicaciones. Esa fue la imagen que se encontraron los sanitarios al llegar.
Los servicios médicos del Sescam llegaron rápidamente al área de servicio para atender a la madre y al recién nacido. Cortaron el cordón umbilical y aseguraron que todo estaba bien con el pequeño y valiente Erik. Una historia con final feliz, que seguro que siempre le recordaran.