El Gobierno de Castilla-La Mancha centra la mayor parte de sus esfuerzos en el desarrollo industrial de la región y, como consecuencia de ello, se han triplicado las ayudas a proyectos de innovación, eje fundamental junto a la formación.
Así lo ha puesto de manifiesto el director general de Economía, Competitividad y Comercio, Antonio Conde, en la Comisión de Industria y Energía de las Cortes regionales, donde ha comparecido junto al director general de Industria, Energía y Minas, Alfonso Vázquez, para hablar de desarrollo industrial a petición del grupo socialista.
Conde ha subrayado el esfuerzo realizado por el Ejecutivo autonómico para «recuperar la confianza» en Castilla-La Mancha, región que sufría «apalancamiento empresarial e industrial» durante los anteriores gobiernos socialistas, según ha afirmado.
El objetivo ahora, ha dicho, es tomar medidas de impulso del desarrollo industrial para aumentar el peso del sector en el Producto Interior Bruto (PIB) de la comunidad, que ahora representa un 11 %, y elevarlo hasta el 20 % centrándose en el desarrollo en industria manufacturera, que está creciendo y acercándose a niveles anteriores a la crisis.
El director general ha admitido que Castilla-La Mancha no tiene «grandes empresas» en el sector industrial, pero la estrategia es «no gastar más, sino mejor» en formación e innovación, y provocar un cambio de modelo industrial.
«Ahora hay más ayudas y mejor dirigidas y está teniendo un mejor resultado en la empleabilidad de Castilla-La Mancha», ha afirmado Conde.
Como ejemplo, ha puesto el de la puesta en marcha de siete centros de excelencia dentro del programa Factoría de Innovación de Castilla-La Mancha (FdI CLM), que están en Albacete, Ciudad Real, Tomelloso, Illescas, Cuenca, Guadalajara y Talavera de la Reina, y en los que están inscritos 325 empresas, el 30 % más de lo previsto.
Ha explicado que en años anteriores todos los sectores eran apoyados por el Ejecutivo autonómico de manera equitativa, pero en 2013 y 2014 se ha puesto especial atención al sector industrial.
Un eje fundamental para provocar la modernización del modelo industrial que se pretende es el de la innovación y, por ello, se ha triplicado la cuantía dirigida a las ayudas concedidas a los proyectos de innovación industrial.
En 2010, las ayudas fueron de 117.524 euros y en 2013, han ascendido hasta los 367.377 euros.
«Se trata de demostrar a Europa que a través de esta estrategia apostamos por la innovación y tecnificación de sectores productivos para tener acceso al mayor número de fondos. De hecho, Castilla-La es la única región de España denominada por la Comisión Europea como región de confianza por su aplicación del Programa Operativo en 2013», ha afirmado.
La «buena acogida» por parte de la Unión Europea así como el cumplimiento «riguroso» de los presupuestos podrán «sentar las bases» para que Castilla-La Mancha tenga un «especial atractivo para las inversiones extranjeras», ha resaltado el director general.
Así, ha destacado que en la región se han realizado 25 grandes proyectos de empresas que han invertido más de 300 millones de euros, que han permitido mantener 2.400 empleos y crear otros 900.
Por su parte, el director general de Industria ha desgranado las medidas tomadas por su departamento en materia de seguridad industrial y ha destacado que se realizarán diferentes campañas en este sentido dirigidas a la atención contra incendios en instalaciones o a las instalaciones eléctricas de alta y baja tensión.
Frente al discurso de Conde, el portavoz de Industria del PSOE, Modesto Belinchón, ha denunciado que desde junio de 2011 hasta el momento se han perdido más de 35.000 empleos en el sector industrial de Castilla-La Mancha, como consecuencia de la pérdida de «riqueza empresarial».
Sin embargo, la diputada del PP María José Ciudad ha resaltado el trabajo del Ejecutivo castellanomanchego para recuperar una región en la que la confianza empresarial estaba «hundida» y ha asegurado que «los indicadores» actuales son esperanzadores para Castilla-La Mancha, pues casi tres años después son «completamente distintos» a los que se encontró el Gobierno del PP.