CC.OO. de Castilla-La Mancha ha demandado políticas sociales con mayor atención en salud y dependencia para las mujeres mayores de 65 años que, ante la creciente situación de empobrecimiento por los recortes, es uno los colectivos con mayor nivel de desigualdad y más vulnerable al estado de pobreza.
Se trata de una de la principales conclusiones del informe ‘Envejecimiento activo en las mujeres mayores’ que ha realizado la Fundación 1º de Mayo por encargo de la Federación de Pensionistas de CCOO, para conocer las condiciones de vida del colectivo, y que ha presentado en rueda de presa la responsable regional de Mujer y Salud Laboral del sindicato, Raquel Payo.
«Es obligado el garantizar políticas de salud y bienestar y de atención a la dependencia y a la discapacidad, especialmente con la situación económica actual, de empobrecimiento, desempleo, recortes y austeridad» a las mujeres mayores de 65 años, ha defendido Payo.
Ha recordado como ese colectivo «ha vivido en las últimas décadas los mayores niveles de desigualdad», con rentas más bajas y mayor vulnerabilidad a la pobreza, al contar con menos recursos y ayudas públicas cuando, ha refrendado Payo, alcanza el 10 % de la población española, sobre un 17 % total de los 47 millones de españoles, según los datos de enero de 2013, que «es una cifra considerable y, por eso, debe ser tenida en cuenta en el diseño de cualquier política».
La responsable de CC.OO. ha añadido que más importante que la propia esperanza de vida, que en las mujeres alcanza los 85,35 años -por los 80,19 años de los varones-, «son las condiciones de salud, de ingresos o si existe o no dependencia, porque se enfrenta a más de 21 años de media de vida, aunque curiosamente los ocho primeros años, aproximadamente, con buena salud».
Payo ha ampliado que «un tercio de nuestros mayores tienen algún tipo de dependencia» y que «del total de hogares unipersonales en Castilla-La Mancha con mayores de 65 años el 70 % son mujeres».
DENUNCIAN QUE HAY MÁS POBREZA
A juicio de Payo, el copago o la reducción en las prestaciones «están incrementado la pobreza» en mujeres que cuentan, encima, con menores recursos económicos.
Y ha puesto como ejemplo la Ley de Dependencia y el progresivo desmantelamiento de los servicios que se ofrecen en nuestra región, tanto en cuidadoras como en las cuidadas que, con la eliminación de la cotización a la Seguridad Social y reducción de sus prestaciones, «las condena a la precarización y la frustración».
En esa línea, se ha detenido en que el informe también refleja que «tan solo el 36 % de este colectivo es beneficiario de un prestación generada por cotización propia y un 93 % recibe la pensión contributiva por viudedad».
«CC.OO. entiende que es imprescindible que el Estado actúe como proveedor y garante de servicios públicos y de protección social que hagan posible una vida de calidad, autónoma e independiente para las mayores», ha concluido Payo.
Por su parte, el secretario general y la secretaria de Mujer de la Federación Estatal de Pensionistas de CC.OO., Julián Gutiérrez y Ana Martínez, respectivamente, han reflexionado en torno a que los actuales «brutales» recortes «se van a hacer visibles dentro de cinco años en las mujeres mayores de 65 años».
Y han señalado, como claves en ese «deterioro social», la pérdida de valor adquisitivo en las pensiones, pese al crecimiento de un 0,25 %, que, en ningún caso, compensa la inflación media de los últimos diez años (2,5 %), y la eliminación del casi el 50 % de las ayudas públicas en materia de dependencia desde el 2010, al pasar de 2.000 millones de euros a los actuales 1.180 millones.