El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha firmado hoy el protocolo de colaboración con los alcaldes de Bargas, Gustavo Figueroa, y de Olías del Rey, José Manuel Trigo, para la financiación a partes iguales del colector del Arroyo del Aserradero, un proyecto que vincula a los tres municipios en sus desarrollos urbanísticos e industriales.
Toledo, Bargas y Olías vinculan sus crecimientos con el acuerdo sobre el colector.
Page ha señalado que el acuerdo que se ha firmado hoy es una iniciativa «trascendente» que va más allá de una importante obra de saneamiento que acabará con vertidos de aguas sin depurar al Tajo. Más que eso, este protocolo «vincula y hermana para mucho tiempo los desarrollos y crecimientos de Olías del Rey, Bargas y Toledo», ha dicho el alcalde.
Tras la firma de este documento, que establece la división en tres partes del presupuesto de la obra, Page ha explicado que la depuración, como el abastecimiento, son infraestructuras «clave» sin las cuales no se pueden desarrollar proyectos urbanísticos ni industriales ni, por tanto, oportunidades de negocio y generación de empleo.
Por eso, esta actuación supone que la estrategia de crecimiento de los municipios implicados «debe ser coordinada y mancomunada» y, por tanto, «estamos unidos para cualquier crecimiento que se plantee en la zona norte de Toledo a medio y largo plazo», ha recalcado el alcalde, quien ha agradecido a los vecinos del barrio de San Antón la paciencia que han tenido hasta la llegada de una solución definitiva para el colector.
DESARROLLO SOSTENIBLE
El alcalde de Olías, José Manuel Trigo, ha manifestado que el camino hasta la firma de este acuerdo «no ha sido fácil» debido principalmente a la magnitud de la obra que hay que acometer y a las dificultades económicas que están teniendo todas las administraciones y, en especial, los ayuntamientos. También ha agradecido la colaboración que va a recibir de la Diputación y la disposición colaboradora de Bargas y Toledo para superar las dificultades.
Por su parte, Gustavo Figueroa ha destacado la «paciencia» que ha tendido el Ayuntamiento de Toledo y ha recordado que los problemas del actual colector se remontan a hace veinte años. Así, «cada vez que había una crecida había vertidos al Tajo sin depurar», ha dicho Figueroa, quien ha indicado que esta actuación «permitirá un desarrollo más sostenible de nuestros municipios».
CONDICIONES DEL ACUERDO
El concejal de Urbanismo, Javier Nicolás, ha sido el encargado de explicar los pormenores del documento firmado hoy, que deberá ser rubricado en un próximo convenio en el que participarán los ayuntamientos y la Empresa Estatal de Aguas de las Cuencas de España (ACUAES), redactora del proyecto.
Asimismo, los municipios dispondrán de un periodo de seis meses para firmar otro documento sobre el coste y las condiciones de la depuración de las aguas, cuya gestión corresponderá al Ayuntamiento de la capital regional.
La financiación será a partes iguales y se apunta la posibilidad de aprovechar Fondos Feder, lo que disminuiría el coste municipal de la obra. En este sentido, el equipo de Gobierno de Toledo va a insistir en su petición de colaboración a la Diputación Provincial, que ya ha comprometido su ayuda a las otras dos localidades.
A partir de ahora, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente tendrá que licitar la obra conforme al proyecto de ACUAES con un coste aproximado de 4 millones de euros, si bien se espera una reducción en la adjudicación. Los ayuntamientos pagarán la infraestructura mediante un canon anual a la empresa estatal durante un periodo de quince años.