El Sindicato Independiente de Celadores de Personal de Gestión y Servicios (SIC-GS) y el sindicato CC.OO. han rechazado el plan de recursos humanos que plantea el Servicio regional de Salud (Sescam) para el personal no sanitario del nuevo Hospital de Toledo.
SIC-GS y CC.OO. han manifestado su posición en sendos comunicados ante la reunión el próximo lunes de la Mesa Sectorial con el objetivo de abrir una negociación sobre el Plan de Ordenación de los Recursos Humanos del nuevo Hospital Universitario de Toledo.
CC.OO. ha denunciado que en base a este plan, 340 trabajadores del Sescam van a pasar a depender de una empresa privada, algo que a su juicio «romperá, distorsionará y dificultará» su integración en el funcionamiento de la sanidad pública.
El sindicato ha explicado que en los últimos hospitales abiertos en Castilla-La Mancha se habían externalizado los servicios de cocina, limpieza, lavandería o vigilancia, pero ahora el Sescam «pretende que también estén al servicio del lucro de una empresa privada los celadores, auxiliares administrativos y trabajadores de mantenimiento».
«Creemos que se abre un melón peligrosísimo, con consecuencias impredecibles y muy negativas», ha advertido.
Por su parte, SIC-GS ha dicho «rotundamente no» al plan del Sescam porque, a su juicio, supone «un nuevo asalto a los derechos de los trabajadores y a la sanidad pública» de Castilla-La Mancha.
«Demuestran nuestros gestores su propia inutilidad al reconocer que no son capaces de ofrecer servicios eficientes ya que tienen que recurrir a empresas especializadas», ha afirmado.
Por todo ello, el sindicato ha pedido la dimisión del consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz; del gerente del Servicio regional de Salud, Luis Carretero, y del director general de Recursos Humanos del Sescam, Miguel Moreno Verdugo.
Unas dimisiones que también solicitaban, según aseguran, a los responsables del anterior Gobierno socialista y seguirán haciéndolo «con todos aquellos que atenten contra los trabajadores de la sanidad pública».