La excavación de varias tumbas de lo que fueron en su día las bañeras del delubrum, o baño ritual, del santuario hispanovisigodo de Santa María de Sorbaces, conocido como el Tesoro de Guarrazar, en la localidad de Guadamur, a pocos kilómetros de Toledo, ha sido el trabajo que los arqueólogos han desarrollado durante toda la semana, como ha informado la alcaldesa de la localidad, Sagrario Gutiérrez.
«Junto al habitual equipo de arqueología de Guarrazar, para este trabajo de excavación de restos humanos se ha contado con la inestimable ayuda del equipo dirigido por el prestigioso antropólogo Armando González, de la Universidad Autónoma de Madrid. Sin duda, los análisis de laboratorio de los restos óseos permitirán conocer muchos características de los individuos que habitaron este lugar durante los siglos VIII y IX».
En la visita realizada a las excavaciones por Sagrario Gutiérrez, además de disfrutar con los hallazgos arqueológicos, ha vuelto a reiterar el decidido apoyo que, tanto el Ayuntamiento de la localidad como la Fundación Guarrazar, mantienen al proyecto de investigación que se desarrolla en este importante yacimiento.
Coronas votivas, el rey visigodo Recesvinto…
El Tesoro de Guarrazar es un conjunto de coronas votivas y otros elementos de orfebrería hallados a finales del siglo XIX a las afueras de Guadamur y que debieron ser ofrendas de reyes y personajes de alto rango a alguna de las basílicas de la capital del reino, que era Toledo. Destacan dos brazos de una cruz procesional de oro y gemas, y la corona votiva del rey visigodo Recesvinto (649-672), de la que penden las letras con su nombre como oferente.
El Tesoro está repartido en el Museo Arqueológico Nacional, el Palacio Real de Madrid y el Museo Nacional de Moven Agen, en París.
El yacimiento de Guarrazar, premio Hispania Nostra por su gran conservación
Si hacemos historia sobre Guarrazar…
El yacimiento arqueológico de Guarrazar se encuentra en el paraje de este nombre, que se hizo conocido a partir de enero de 1859 cuando se hizo público el hallazgo fortuito de un tesoro visigodo de gran relevancia.
Los trabajos arqueológicos desarrollados por José Amador de los Ríos, en abril de 1859 desvelaron que el tesoro se escondía en el extremo de una necrópolis cristiana de la que se conservaban varias filas de tumbas y restos de una capilla funeraria. En la capilla había una sepultura cuyo epitafio en latín desvelaba que en el año 693 allí había sido enterrado un presbítero.
Se consideraba un yacimiento de escasa importancia hasta que…
Pero a pesar del valor del tesoro, Guarrazar se consideraba un yacimiento de escasa importancia… hasta que los descubrimientos realizados en los últimos años están desvelando que el tesoro no procedía de una o varias iglesias relevantes de Toletum, sino que habría formado parte de la basílica que regía el santuario que hubo en este lugar, al menos desde el siglo VI hasta la invasión árabe en el año 712.
Las grandes basas de mármol y sillares de granito que aparecen en los cimientos se consideran evidencias suficientes de la existencia de un rico edificio que ocupaba más de 450 metros cuadrados.