El Puertollano no ha reunido el dinero preciso para presentar el aval, de 400.000 euros, para jugar en Segunda B, tras el ascenso logrado al término de la pasada temporada, que le obligará a seguir en Tercera División; el presidente, Guillermo Fernández, ha presentado su dimisión.
Así lo ha asegurado en rueda de prensa de urgencia el presidente del club, Guillermo Fernández, quien también ha hecho oficial su dimisión tras dos campañas al frente del club, que «no tiene nada que ver con la no consecución del aval» porque «ya lo tenía decidido desde hacía tiempo», ha puntualizado.
Visiblemente emocionado, Fernández ha lanzado un mensaje de agradecimiento a junta directiva, socios y entidades que «me han ayudado hasta el final» y ha explicado que «no hemos podido hacer más y ahora se tendrá que convocar una asamblea de socios para dictaminar el futuro del club».
Fernández ha precisado que se ha intentado «hasta el final» conseguir los 400.000 euros de aval -el plazo concluyó a las 12:00 horas de hoy- para ratificar en los despachos el ascenso a Segunda B conseguido en los terrenos de juego: «llamé a todas las puertas y tengo la conciencia tranquila», ha razonado.
«Primero lo intentamos con las administraciones, pero no lo conseguimos, y después con empresas de dentro y fuera de la ciudad, pero la cantidad necesaria para presentar como aval era tan abultada que al final no ha sido posible», ha subrayado.
Ha calificado de «gestión transparente» su dirección en los dos años que ha estado al frente del club que «he hecho desde el amor a este club», ha defendido, «y nuestra desgracia ha sido no haber podido ascender. Ahora ya me da igual quien suba», ha remarcado.
Guillermo Fernández, tras agradecer «los mensajes de apoyo» que ha recibido en estos días tanto para él como para el club, se ha puesto «a disposición de quien quiera coger el club» para prestarle su ayuda, aunque ha vaticinado, por último, que el futuro del club se le antoja «complicado en Tercera división».