El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado hoy los contratos de gestión de dos nuevas residencias de mayores en la región, ambas en la provincia de Toledo, que en total aportan 240 nuevas plazas de residencia y 80 más para centros de día.
El consejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, ha informado en conferencia de prensa posterior al Consejo de Gobierno de estos contratos de gestión, cada uno de ellos dotados con 25 millones de euros y por un plazo de doce años.
Echániz ha concretado que las residencias de mayores, cada una con 120 plazas de estancia y 40 más como centro de día, están ubicadas en las localidades de Mora e Illescas.
En concreto, la residencia de Mora cuenta con 9.300 metros cuadrados y la de Illescas, con 11.322 metros cuadrados.
El consejero ha explicado que estas dos residencias estaban «prácticamente terminadas en el momento del cambio de legislatura», pero ha lamentado no haberlas podido abrir antes debido a que «no había dinero ni para pagar el funcionamiento».
Por otro lado, Echániz también ha informado de la aprobación del contrato marco que regula que todas las residencias públicas y privadas de la región, gestionadas por empresas, ayuntamientos u organizaciones sin ánimo de lucro, puedan someterse a un esquema de trabajo homogéneo.
Este contrato marco determinará las condiciones para contratar las plazas residencias de mayores y centros de día de las cinco provincias, por lo que, según ha resaltado Echániz, se eliminará la discrecionalidad en la contratación de plazas públicas, toda vez que se introducen criterios de seguridad jurídica.
Con este contrato marco, se ofrecerá el mismo precio a todas las plazas de residencia.
Echániz ha resaltado que para optar a firmar este convenio marco, las entidades que gestionen las residencias deberán tener el certificado de calidad en vigor y cumplir una normativa «rigurosa para mejorar la calidad asistencial».
Las empresas, entidades o ayuntamientos tendrán garantizados en 2015 la continuidad de las plazas públicas, pues el próximo año será el primero en el que se podrá firmar dicho documento, que tiene una vigencia de dos años prorrogables por otros dos.
Asimismo, en este contrato marco se establece un número mínimo de plazas para las zonas rurales y se introduce, por primera vez, la libertad de elección de residencia, de forma que los usuarios podrán elegir a partir del 1 de enero en qué residencias prefieren estar y los traslados se harán efectivos en 2016.