El Ayuntamiento de Toledo y Cáritas Diocesana de Toledo han firmado un convenio colaboración, por el que el Consistorio aporta 50.000 euros al centro de personas sin hogar “Cardenal González Martín”; el único albergue de la ciudad que ha atendido a más 300 personas y ha ofrecido una media de 40 comidas diarias a personas no alojadas en 2023.
Una firma que ha sellado el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, y el director de Cáritas Diocesana, José Luis González, y a la que también ha asistido la concejala de Asuntos Sociales, Marisol Illescas, y la responsable del centro, Virginia Rodríguez.
40 años ayudando «sin preguntar qué piensan o de dónde vienen»
«Cada aporte es valioso y contribuirá a que el albergue pueda seguir desarrollando su labor de manera efectiva», ha indicado el director de Cáritas, que ha enmarcado esta firma en la celebración el próximo domingo, 29 de octubre, del Día de las Personas sin Hogar.
El centro, ha dicho, no ofrece solo pasar una noche, sino «un programa integral, de acompañamiento» y de inclusión social de las personas. «No tener un hogar supone no cubrir necesidades fisiológicas, de protección, aceptación social, autoestima, no tener acceso a derechos humanos fundamentales, un lugar para descansar, recuperarse, un espacio personal para reconstruir la propia vida individual y familiar», lo que supone la pérdida de derechos fundamentales, ha detallado.
Por su parte, el alcalde ha resaltado la importancia del albergue ‘Cardenal González Martín’, al que ha considerado ser «seguramente uno de los recursos más importantes» de Cáritas, que lleva desde 1986 «ayudando a miles de personas sin preguntarles qué piensan, de dónde vienen, simplemente ayudarles porque necesitan ayuda».
Velázquez ha confesado que conoció de cerca la realidad de este centro como alumno de Tavera, lo que propició que tuviera algunas charlas con transeúntes que pasaban por allí, aprendió de esas conversaciones que «cualquiera de nosotros pueden pasar por esta situación».
Dicho esto, ha valorado que el servicio es «indudablemente bueno» y «de lo mejor» que tienen de toda la paleta de servicios sociales que Cáritas ofrece en la ciudad.
Aumenta el número de mujeres que solicitan estancia en el centro
La responsable del centro ha explicado que hasta 2013 eran las Hijas de la Caridad las que se ocupaban del centro y ahora lo gestiona un equipo técnico de trabajadores, y ha valorado cómo se ha ido adoptando estos años a las nuevas realidades.
Este centro, junto al de Talavera, son los dos de todos los que existen por la provincia, y que tienen como objetivo ofrecer un alojamiento nocturnos y estancia diurna, así como cubrir necesidades de alimentación, higiene, medicación y ropa.
Se trata de un centro que da alojamiento prolongado de media estancia -de seis meses a un año máximo-con apoyo social- y acompañamiento a personas que quieran comenzar un proceso para contar con un espacio alternativo a la calle o gestionar una prestación económica para salir de su situación.
Rodríguez ha explicado que mientras antes de la pandemia el paso de transeúntes por el albergue estaba descendiendo «notablemente», tras el Covid-19 la situación cambió, siendo el grado de ocupación del centro de prácticamente de un 95 o un 100% lo largo de todo el año.
Respecto al perfil, ha señalado que es variado, resaltando el incremento de estancias de mujeres de un 5 a un 30% así como el de inmigrantes, pasando de un 25 a un 50% en los últimos años, debido al aumento de solicitantes de protección internacional que llegan a Toledo de países latinoamericanos.