Los dos sindicatos mayoritarios en Castilla-La Mancha, CCOO y UGT, han celebrado el acuerdo firmado entre PSOE y Sumar para la próxima legislatura que incluye una reducción de la jornada laboral de 40 a 37,5 horas sin una rebaja de sueldo.
La iniciativa, que es solo un acuerdo de Gobierno a falta de que Pedro Sánchez pudiera ser investido presidente, contempla que en 2024 se pasase a la jornada laboral de 38,5 horas y ya en 2025 se redujese a las 37,5 horas. Para los sindicatos se trata de una medida positiva que ayudará a la creación de empleo y a la productividad. En el lado opuesto está Fedeto (Federación Empresarial Toledana), que ha calificado de «absurda» la medida y vaticina que provocará una «espiral inflacionista».
CCOO: «Una medida muy importante y necesaria»
Para Comisiones Obreras de Castilla-La Mancha, este anuncio es «una medida muy importante y necesaria» que va a permitir «la creación de empleo y el aumento de la productividad». La secretaria de Acción Social de CCOO CLM, Nunzia Castelli, asegura que la rebaja de jornada «mejorará la seguridad, la salud laboral y favorecerá la conciliación de trabajadores y trabajadoras».
El sindicato argumenta que la medida debe ir «acompañada de una regulación en materia de distribución de la misma» que debe concretarse a través de la negociación colectiva. «No puede haber un único modelo de reducción de jornada, habrá que pactar fórmulas diferentes para reducir de forma generalizada el tiempo de trabajo en cómputo anual», afirma Castelli.
Al mismo tiempo, desde el sindicato apelan a las empresas que «se resisten a repartir los incrementos de productividad porque lo que quieren es maximizar sus beneficios a costa de la explotación de la fuerza del trabajo».
UGT: «Nos parece un paso adelanto»
A su vez, el sindicato UGT CLM, valora el acuerdo como «positivo» y califica la reducción de jornada sin rebaja de sueldo en un «importante avance». Para Luis Manuel Monforte, secretario general de UGT CLM, el acuerdo es solo un primer paso porque «iríamos más allá y optaríamos por avanzar con paso firma hacia esas 35 horas semanales».
«Nos parece un paso adelante», subraya Monforte, aunque pide un «plan de choque contra el desempleo juvenil» que se debería ampliar al resto de colectivos más vulnerables. «Otra cuestión fundamental es la de subir el SMI para que no se pierda poder adquisitivo. Es otra vieja reivindicación de nuestro sindicato que ha ido ganando fuerza en los últimos meses por la subida del IPC».
Entre ese paquete de medidas que reivindica UGT está la de «regular el despido» porque es «una de las lagunas» de la reforma laboral. «Tenemos que regular el despido en nuestro país. En España sale barato despedir y esto hay que cambiarlo».