«Ante la gravedad de los últimos incendios acontecidos en la sierra norte de Guadalajara, desde el comité provincial de Geacam-Guadalajara queremos volver a denunciar el irresponsable recorte de medios que se ha venido produciendo en los últimos años en el dispositivo de prevención y extinción de incendios forestales de Castilla-La Mancha», así comienza la denuncia pública del Comité de Empresa de Geacam-Guadalajara, en la que piden dimisiones y anuncian concentraciones.
Según el Comité de Empresa de Geacam-Guadalajara, los recortes en el sector «han supuesto que unidades que antes estaban formadas por 11 personas en cada turno de trabajo, se hayan visto reducidas a cuatro o cinco integrantes, siete en el mejor de los casos. Han supuesto la desaparición en muchas zonas de las patrullas de pronto ataque, un medio de vital importancia en el dispositivo, la desaparición de puestos de vigilancia, vitales para para rápida visualización y ubicación de los conatos de incendio y la rápida intervención de las brigadas, la desaparición de medios aéreos, como el caso uno de los dos helicópteros de la BIFOR de Villares y su correspondiente cuadrilla, con la consecuente pérdida de eficiencia. El primer ataque a un incendio es primordial, el que determina si un incendio se quedará en un simple conato o se convertirá en un gran incendio, y con los medios actuales, pese a la profesionalidad y dedicación de los trabajadores del dispositivo, resulta imposible actuar con la suficiente efectividad.Estos recortes han sido también brutales en la prevención de incendios. Se dice acertadamente que los incendios se apagan en invierno, mediante una eficiente prevención de los mismos, pero en Castilla-La Mancha se ha reducido en tres meses el trabajo de las cuadrillas durante el periodo de prevención, con el consiguiente efecto en la «suciedad» de nuestros montes».
Por otra parte, han expresado su solidaridad con los afectados, vecinos de Beleña de Sorbe, de Aleas y de las Urb. Las Torres y Romerosa, de Cogollludo, la Urb. Pueblo Nuevo, de Arbancón, Muriel, Monasterio, Fraguas y Semillas. A los vecinos de Bustares, Gascueña de Bornova, de Prádena de Atienza y los Condemios. «Entendemos lo que es levantar las persianas y ver un lo que antes era un orgullo y un motivo para soportar la dureza de vivir, en estos tiempos, en el medio rural. Con la desolación que deben sentir al ver el paisaje que les ha acompañado a lo largo de su vida devastado por el fuego. A las personas que ese mismo entorno le sirve de sustento», afirman.
Al mismo tiempo, aseguran que no entienden «por qué la Administración ha gestionado de forma tan errónea este incendio. No entendemos por qué la máquina de Cogolludo, tardó al menos tres horas en llegar a Aleas. Por qué la patrulla de Condemios no puede trabajar en la Extinción al no llevar agua, por qué el camión nodriza ha estado inoperativo la mayor parte del tiempo. Queremos saber por qué desactivó a la práctica totalidad del Operativo la noche del 17 al 18 de julio y en la mañana del 18 de julio. Por qué se dejó solamente a 3 medios para vigilar y controlar un incendio que, en esos momentos, llevaba más de 400 ha. ¿Es que no sabían que esos tres medios apenas suman entre ellos 11 personas? ¿Por qué se tomaron esas decisiones sabiendo que el Boletín Meteorológico daba más calor y más viento para los días siguientes?».
E insisten en que «queremos saber por qué los Agentes Medioambientales, con las capacidades que les otorga la legislación vigente, trabajan separadamente de nosotros, con distintos horarios, reduciendo así la eficacia del trabajo de ambos».
En su opinión, «se necesita un Plan de Extinción que en una emergencia como la de esos días, funcione de forma segura y coordinada. En vez de eso tenemos que en cuanto hay un incendio que sobrepasa un ataque, funciona gracias a que personas que lo integran pasan jornadas enteras trabajando sin descanso, conduciendo con fatiga, dando órdenes a los integrantes de ese dispositivo que ponen en riesgo sus vidas porque los medios son escasos».
«No podemos olvidarnos del gran trabajo realizado por los retenes forestales, tanto de Castilla-la Mancha como de otras comunidades que prestaron su apoyo. Mientras políticos en sus comunicados no paran de dar datos de los medios que se han movilizado y de ensalzar a la UME, los trabajadores de Infocam se han dejado y se dejan la piel con profesionalidad y dedicación desde el primer momento, a pesar de la falta de medios, en turnos extenuantes y sin apenas descanso, labor poco o nada reconocida y que queremos poner de manifiesto», recoge la nota de prensa enviada a los medios de comunicación.
Ante todo esto, «no podemos más que exigir la dimisión de la consejera de Agricultura, María Luisa Soriano, máxima responsable del plan Infocam, y por tanto responsable de todo lo que ha pasado estos días; y del gerente de la empresa Geacam, Pedro Ruiz, por su ineptitud demostrada en los últimos años para dirigir una empresa de estas dimensiones».
Por otra parte, desde el comité provincial de Geacam-Guadalajara han convocado a todos los trabajadores y a toda la sociedad de Guadalajara a sendas concentraciones los días 6 y 7 de agosto de 11:00 a 14:00 ante la delegación del gobierno de Castilla-La Mancha, en la confluencia de la Calle Mayor con la plaza del Jardinillo, para «protestar por los recortes que están esquilmando nuestro patrimonio natural, y reclamar las mejoras que el dispositivo de prevención y extinción de incendios forestales requiere».