El portavoz del equipo de gobierno de la Diputación de Toledo, Jaime Ramos, ha confirmado que la institución «tiene la intención de hacerse con algún edificio» de los subastados por la Junta «para centralizar servicios y optimizar recursos». Se refiere al conocido como «Graneros de San Julián», situado frente al Palacio de Fuensalida, que el anterior Gobierno regional compró al Arzobispado de Toledo en 2005.
Jaime Ramos no concreta la «identidad» del inmueble ya que «el asunto no está cerrado ni casi se ha empezado a hablar, pero hay intención de hacerse con algún edificio para centralizar servicios y optimizar recursos», pero se refiere al llamado «Graneros de San Julián, que el Gobierno regional compró por dos millones de euros al Arzobispado para ampliar a sede de la Presidencia autonómica. Al ser trasladada la sede del Gobierno regional al Colegio de Doncellas Nobles, aquel quedó sin uso.
A finales de 2011, el Gobierno de María Dolores de Cospedal incluyó este inmueble entre los que salieron a subasta para aumentar los ingresos del Plan de Garantías de los Servicios Sociales Básicos, con un precio de salida de 1,6 millones de euros. El Gobierno regional tenía previsto subastar este edificio el pasado 13 de febrero, pero finalmente la Junta amplío el plazo para presentar ofertas y no ha fijado nuevas fechas para las subastas.
«La Diputación tiene edificios alquilados, prestados en cesión de uso y dispersos, algunos en propiedad. Ahora tenemos varias dependencias repartidas, lo que nos hace tener más personal de administración, etc. Tratamos de ver si nos encaja esta oportunidad para centralizar servicios y optimizar recursos», concluye Jaime Ramos..