El senador del PP Miguel, Ángel Rodríguez, ha opinado que el secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, teme enfrentarse a las urnas, que «le darán la espalda», y por eso «se pone malo cuando oye hablar» de la reforma de la ley electoral para elegir directamente a los alcaldes.
Rodríguez se ha pronunciado así en rueda de prensa después de que García-Page haya dicho que es «muy grave» y un «intento de amañar las elecciones» y de «atraco electoral» la posibilidad apuntada por el PP de reformar sin consenso la ley electoral.
«Como no está conforme con la pedrea que le tocó en el último congreso del PSOE, sigue deshojando la margarita y empeña todos sus esfuerzos, no en trabajar por los ciudadanos, sino en tener un puesto relevante en el PSOE para ver si así no tiene que enfrentarse a las urnas», ha afirmado el senador del PP.
A su juicio, la elección directa de alcaldes es una medida que «valoran la mayoría de ciudadanos de España y de Castilla-La Mancha», al igual que la reducción de diputados, y por ello ha lamentado el rechazo del líder socialista.
Por otra parte, Rodríguez ha apuntado que «hay una descoordinación clara en el PSOE, hay una falta de liderazgo», pues «andan como pollo si cabeza».
En este sentido, ha criticado que García-Page no se pronuncie sobre su futuro político y ha considerado que cuando el líder socialista de la región dijo que no iba a optar de nuevo a la Alcaldía de Toledo, pensaba que «iba a jugar un papel más relevante del que le ha tocado jugar».
«No le tienen en tan alta estima como él se esperaba y, por lo tanto, tiene de segundo plato a los castellanomanchegos y a los toledanos de cara a tener alguna puerta abierta o algún sillón en el que colocarse si el PSOE le da la espalda como parece ser que será», ha afirmado.
Frente al PSOE, el senador autonómico ha asegurado que el PP encara el «tramo final de una legislatura complicada, difícil», con «los deberes prácticamente hechos».
Ha apuntado que la legislatura «empezó con una región en quiebra y con unos servicios públicos amenazados» tras «la ruinosa gestión del PSOE de Barreda y Garcia-Page» y ahora, ha afirmado, «la recuperación económica es una realidad».
Entre otras medidas, ha destacado que la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, garantizó los servicios sociales básicos y tomó «medidas importantes de racionalización» como eliminar organismos duplicados, vender coches oficiales o suprimir la mitad de los altos cargos públicos.
Además, ha señalado que hay 21.016 parados menos que hace seis meses en Castilla-La Mancha y que los últimos once meses han sido de crecimiento del empleo en términos interanuales.