La Policía Nacional ha detenido a dos personas en Toledo que alquilaban apartamentos vacacionales inexistentes a través de Internet, con lo que consiguieron estafar a 31 personas de todo el país y defraudar más de 4.000 euros.
Según ha informado la Policía en un comunicado, los arrestados solicitaban a las víctimas el ingreso de entre 100 y 200 euros en concepto de señal para la reserva del inmueble, que en realidad no existía.
Muchos de los estafados se encontraban ya de camino a sus destinos cuando los investigadores les comunicaron que habían sido víctimas de un fraude.
Las investigaciones comenzaron el pasado mes de julio, tras una denuncia en la Comisaría de Toledo en la que una mujer informaba de que había sufrido una estafa en el alquiler de un apartamento de vacaciones.
La víctima había visto un anuncio de un inmueble en Alicante en una conocida página de compraventa de artículos entre particulares y, tras contactar vía telefónica con la presunta propietaria, llegaron a un acuerdo por el que la víctima debía enviar 150 euros mediante giro postal inmediato en concepto de señal y reserva.
Pero tras realizar el ingreso de la cantidad, la supuesta propietaria desapareció sin volver a dar señales.
LA INVESTIGACIÓN LLEGÓ A CORREOS
Dado que el giro había sido cobrado en una sucursal de Correos de Toledo, los investigadores se desplazaron hasta allí y averiguaron que la persona que había cobrado el dinero era una mujer, acompañada de un varón, que en otra ocasión había recibido otros dos giros postales, cada uno de ellos por idéntica cantidad y que resultaron corresponderse con otras dos estafas que ya habían sido denunciadas.
Una vez conocida la identidad de estas dos personas, los agentes recabaron un informe con todos los giros postales que les habían sido remitidos en las últimas fechas, y resultaron ser un total de 31 envíos por un importe superior a los 4.000 euros.
Los dos responsables fueron detenidos por los investigadores cuando trataban de cobrar un nuevo giro postal.
Los agentes les intervinieron dinero en efectivo y numerosas tarjetas SIM que eran usadas de forma simultánea en la publicación de los anuncios de alquiler en Internet, con el objeto de dificultar su identificación y entorpecer la labor policial.
La Policía aconseja, para no ser víctima de estafas a través de Internet, desconfiar de anuncios en los que el precio está muy por debajo del de mercado, acudir a páginas de máxima fiabilidad, leer las opiniones de anteriores inquilinos y utilizar medios de pago seguros.
También aconsejan desconfiar de anunciantes que no proporcionen un número de teléfono fijo perfectamente identificable y, en caso de alquiler de un inmueble entre particulares, comprobar la existencia del apartamento mediante algún tipo de documentación o solicitar un compromiso de contrato de alquiler.