“Aquí en Guadalajara, con tan sólo tres concejales, IU gobernó durante un año, un mes y un día. Creo que no es lógico que una fuerza política que sólo recibió el 10% de los votos gobernara sobre el 90% restante. Posteriormente, en 2003, cuando al Partido Popular sólo le faltaron 300 votos para obtener mayoría absoluta, éste fue apartado del gobierno municipal, en beneficio de IU, que obtuvo grandes parcelas de poder a pesar de haber obtenido sólo un concejal. A ese concejal se le adjudicó la primera tenencia de alcaldía”.
Fue tras las elecciones municipales de 1999, tras las que gracias a un pacto PSOE-IU se convirtió en alcaldesa Blanca Calvo, la cabeza de lista de IU en aquellos comicios.
Con este ejemplo ha defendido la reforma de la ley electoral que propugna Mariano Rajoy su alcalde más emblemático en CLM, el de Guadalajara, Antonio Román. En este sentido, ha apuntado que se puede discutir si es en dos vueltas o en una; si es con el 40 por 100 de los votos o con el 35; pero que el alcalde de una ciudad tiene que se la lista más votada.
“Hoy el señor Sánchez no sería el Secretario del PSOE si hubiera aplicado lo que ahora propone, dado que el señor Pérez Tapias y el señor Madina obtuvieron más votos que él en su proceso de elección. Si en su casa van a favor del gobierno del que recibe la mayoría de apoyos, ¿por qué no tienen la misma postura para los comicios municipales?”, se ha preguntado y ha apostillado que siempre ha defendido que gobierne la lista más votada.