Gloria Lozoya, responsable de CCOO Hábitat, ha explicado que “ante la imposibilidad de seguir presentando más demandas contra la empresa SPS porque hemos llegado un punto en el que tenemos todo judicializado por diferentes cuestiones como pueden ser los pluses y la antigüedad, la gota que ha colmado el vaso es que ahora la empresa pretende imponer a las trabajadoras los días de vacaciones”.
“Este ha sido el motivo por el que no nos ha quedado otra salida que convocar una hora de huelga, ya que los juicios se van a un año y medio, y el asunto de las vacaciones no puede esperar. Y hemos convocado una hora para no perjudicar a los usuarios y usuarias de la residencia que son personas mayores”.
Aunque son 17 las trabajadoras de la residencia Alcabala afectadas por la decisión de la empresa de establecer de manera unilateral cuándo se pueden coger las vacaciones, a la concentración han asistido trabajadoras de otros centros como Hospital Quirón y Santa Cristina porque también a ellas les afecta los constantes incumplimientos del convenio por parte de la empresa.
Por su parte, Carmen Olivas, responsable de la Federación de Servicios, que incluye a las trabajadoras de la cocina ha comentado que “llevamos batallando desde agosto de 2022 porque no les quieren aplicar el convenio que les corresponde, que es el de restauración colectiva, y les están aplicando el de hostelería y además de mala manera. De hecho les están aplicando el salario base, lo que supone que estas trabajadoras están cobrando entre 800 y 900 euros al mes, sin llegar siquiera al salario mínimo interprofesional”.
Aparte de los incumplimientos, desde CCOO han denunciado la actitud y la cerrazón de la empresa que ha habido veces que ni siquiera se ha presentado a las mediaciones, lo que es una absoluta falta de respeto hacia las trabajadoras.
Por último, Dolores Vera, del comité de empresa y trabajadora de la residencia, ha reconocido el desánimo que tienen y ha indicado que “al igual que nosotras cumplimos con todas nuestras obligaciones para prestar un buen servicio, pese a lo difícil que es vivir con un sueldo de 900 euros, exigimos a la empresa que cumpla sus obligaciones y cumpla el convenio”.