La estatua en homenaje de Federico Martín Bahamontes, instalada en el Miradero de Toledo, ha amanecido con destrozos y arrancada de su base, sobre la que descansa la figura del eterno ciclista toledano.
Se trata de un «acto vandálico», como confirman fuentes municipales, que se ha producido durante la madrugada de este viernes 8 de diciembre. En este puente de la Constitución, la ciudad está abarrotada de turistas y visitantes. Desde el Ayuntamiento de Toledo confirman a ENCLM que hay cámaras de seguridad instaladas en la zona porque no es la primera vez que la estatua del «Águila de Toledo» sufre destrozos. El ABC confirma que la Policía Local ha identificado a varios individuos, aunque las investigaciones están abiertas.
La estatua se instaló en 2018 y solo un año después ya sufrió otro acto vandálico. El propio ciclista declaró que, al ver su estatua en el suelo, sus «tripas» se le habían puesto de «color de rosa», lamentando que hubiera gente que «no agradece nada». El ciclista pensaba que su homenaje «debería estar rodeado de vallas o cadenas».
Bahamontes murió el 8 de agosto
El pasado verano, el 8 de agosto, Federico Martín Bahamontes murió a los 95 años después de una vida dedicada al ciclismo y considerado como el mejor escalador de la historia. Ganó el Tour de Francia en 1959 y consiguió 11 victorias de etapa en las denominadas grandes vueltas: siete en el Tour, tres en la Vuelta a España y una en el Giro de Italia. En su despedida, un pelotón de ciclistas acompañaron a la pompa fúnebre del toledano por las calles del casco y la estatua hoy vandalizada se cubrió de homenajes a «Fede», el ciclista eterno.
Lágrimas en su pelotón y con el maillot de lunares, Bahamontes corona Toledo por última vez