Desde el cierre de las instalaciones del servicio de Retirada de Vehículos de Guadalajara hace unas semanas, nada ha cambiado. La Inspección de Trabajo sigue acudiendo al depósito para comprobar si se han mejorado las condiciones, pero solo han podido atestiguar que «todo sigue igual, o peor», tal y como denuncian los empleados del servicio.
El depósito cuenta con dos portones de acceso, de los que uno no abre y el otro también está averiado por lo que «no nos dejan tocarlo, ni abrirlo ni cerrarlo», asegura el delegado sindical Francisco Javier Corral. Las deficiencias en el edificio, situado en los bajos de la Estación de Autobuses, son evidentes: puertas interiores estropeadas, no hay salida de humos y, además, de las dos grúas que hay, solo una está operativa, ya que la otra está rota desde septiembre. Al menos «ya está en el taller».
Al no poder meter ni sacar vehículos del depósito, cuando son requeridos por la Policía Local, se ven obligados a trasladar los coches mal aparcados a otra calle donde no moleste. Le ponen un cepo y, por supuesto la pegatina donde se indica dónde está el vehículo. «Pero tienen que venir al depósito a pagar la multa y luego ir andando a por su coche», detallan, al tiempo que critican que «se les cobra el servicio de custodia, cuando el coche se queda en la calle«.
Pero los problemas de los gruistas no acaban ahí, ya que la plantilla está muy mermada a causa de bajas médicas que no son cubiertas. Dos de los seis trabajadores están actualmente de baja, uno de ellos desde hace meses, «y no van a sustituirle». Aseguran los trabajadores que a partir de enero la situación empeorará cuando se nieguen a hacer horas extras.
Moción del PSOE
Por todo esto, la que fuera responsable de este área en la legislatura pasada y actual concejal socialista en la oposición, ha anunciado la presentación de una «moción de urgencia«. Pilar Sánchez ha explicado que desde abril que se acordó que la gestión del servicio pasara a ser municipal, el actual contrato se prorroga mes a mes. A finales de junio era la fecha efectiva del traspaso, que finalmente quedó en nada.
Ha criticado que la alcaldesa Ana Guarinos “se empeña en buscar excusas donde no las ha” y lo único cierto es que los trabajadores están a la deriva, sin unas condiciones laborales decentes». Es por ello que exigirán en el próximo pleno del 19 de diciembre que se dé cumplimento a los acuerdos aprobados y se remunicipalice el servicio. Asegura que no solo saldría más económico para el Ayuntamiento, sino que mejoría las condiciones laborales de los trabajadores y se daría solución rápida a los problemas existentes.
En la moción, se exigirá también tomar las medidas necesarias para subsanar las deficiencias del depósito porque «no son un capricho».
Por su parte, el delegado sindical ha criticado que ningún responsable del actual equipo de Gobierno haya bajado al depósito para conocer personalmente los problemas. «Solo tuvimos hace meses una reunión en el Ayuntamiento con Isabel Nogueroles que nos dijo que se pondría en contacto, pero aún no lo ha hecho», asegura Corral.