En un comunicado de prensa remitido a los medios de comunicación UGT denuncia la situación de trabajadores y trabajadoras de la empresa pública Correos en Castilla-La Mancha. Cita que «se mantienen contratos de 20 horas semanales -en el mejor de los casos- y cobrando 400 euros al mes en el caso del personal de los centros de tratamiento de Albacete, Ciudad Real y Cuenca, donde hay empleados que solo trabajan cuatro horas diarias y en días sueltos (festivos y fines de semana).
El sindicato se refiere a estas situaciones laborales como “contratos de la pobreza que impuso la anterior dirección con Juan Manuel Serrano como presidente de Correos -y dado que se ha demostrado sobradamente con infinidad de denuncias por parte de UGT que hay cargas de trabajo excesivas y que hay necesidad de ampliar la plantilla-«. En este sentido, UGT Servicios Públicos exige a Correos que modifique estos contratos precarios a jornada completa.
Precariedad en Correos
Afirman que en Correos, a nivel nacional, este tipo de contratos «ha sorprendido de manera desagradable a miles de candidatos que han obtenido plaza en el último proceso de consolidación de empleo. Si ya existía la institucionalización de la precariedad, con casi la mitad de las plazas ofertadas en las recientes ofertas públicas de empleo a jornada parcial, “ahora nos encontramos con la implantación de las ‘plazas de la pobreza’, en las que solo se trabajan festivos y fines de semana con un promedio de 20 horas a la semana en el mejor de los casos y cuya nómina mensual apenas llega a los 400 euros”. Son palabras de Santiago Gómez, coordinador regional de UGT en Correos.
Desde el sindicato apuntan que, aunque existen mecanismos como el concurso permanente de traslados, la expectativa de estos trabajadores para la adjudicación de una plaza a jornada completa puede suponer años de espera, pasando primero por la media jornada para poder acercarse a sus hogares, ya que muchos de ellos han obtenido plaza en otras comunidades donde la oferta es mayor. “Tener que sobrevivir en estas condiciones en ciudades grandes es misión imposible”.
Santiago Gómez explica que ninguna categoría profesional escapa a esta situación de «pobreza laboral y económica, ya sean los puestos de reparto, atención al cliente y especialmente los agentes clasificadores, que es donde se ha implantado esta aberrante fórmula de contratos de festivos y fines de semana». Por ello piden que el Gobierno, a través de la SEPI, acabe con esta situación de forma inmediata.
Según UGT, ninguna categoría profesional escapa a esta situación de «pobreza laboral y económica, ya sean los puestos de reparto, atención al cliente y especialmente los agentes clasificadores»