La Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid se ha puesto a disposición de la Junta de Castilla-La Mancha para evitar riesgos de posible contaminación e incendio en la planta ubicada entre Seseña y Valdemoro donde se acumulan cientos de miles de toneladas de neumáticos usados.
Tras la reunión semanal del Consejo de Gobierno, el portavoz de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, ha hecho referencia a una información del diario El País sobre un proyecto de ambos gobiernos regionales y el Ayuntamiento de Seseña para triturar y emplear en diferentes usos las casi 100.000 toneladas de ruedas usadas que se acumulan en la zona.
Victoria ha recordado que la planta donde se acumulan las ruedas, que principalmente está en Seseña pero que en un 20 % se asienta en Valdemoro -municipio que pertenece a la Comunidad de Madrid-, no tiene funcionamiento desde hace diez años.
Ha indicado que la Consejería de Medio Ambiente se ha puesto a disposición de Castilla-La Mancha para que no se produzca contaminación y riesgo de incendio en este lugar, lo que podría causar daños a las localidades colindantes.
El objetivo, según el portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, es que «ese factor de riesgo pueda ser eliminado».