Cuenca celebra hoy su cuarta y última jornada de las fiestas de San Mateo, que buscan desde hace años el reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Nacional.
Desde la tarde del jueves cerca de 6.000 peñistas de las 50 peñas de San Mateo han llenado los rincones del Casco Antiguo de la ciudad, Patrimonio de la Humanidad desde 1996, en una celebración que tiene como protagonista principal las vaquillas enmaromadas que se sueltan cada tarde, un total de 18 durante estas fiestas.
Con motivo de la celebración del día de San Mateo, que conmemora la liberación de la ciudad por parte del rey Alfonso VIII en 1177, la corporación municipal ha cumplido con el rito de la custodia y devolución del pendón.
En la tarde de ayer, el concejal más joven de la corporación, el edil socialista de Juventud Manuel Martínez, recibió como cada año el pendón de Alfonso VIII de manos del Cabildo Catedralicio, y una comitiva lo escoltó hasta el Ayuntamiento, donde la enseña ha permanecido durante la noche.
A las 10:15 horas de hoy, la Corporación municipal lo ha trasladado de nuevo a la Catedral, y posteriormente se ha celebrado una misa y una ofrenda floral a la estatua del rey Alfonso VIII.
También en la matinal hoy ha tenido lugar la suelta de vaquillas, que tendrán su continuación con la última suelta, esta misma tarde, que pondrá fin a las fiestas de este 2014.
Durante los tres días anteriores se han realizado, tras la suelta de vaquillas, un centenar de atenciones en el puesto de Socorro que la Cruz Roja instala en el Ayuntamiento, aunque ninguna de gravedad.
Tan sólo en la tarde de ayer hubo que trasladar a cuatro personas al hospital ‘Virgen de la Luz’ por diferentes traumatismos, y en las cuatro primeras suelta se registraron siete varetazos y una herida de asta de toro, aunque ninguno precisó traslado hospitalario.