Los especialistas en Neurología del Hospital General ‘Nuestra Señora del Prado’ de Talavera de la Reina detectan alrededor de 1.200 nuevos casos de alzheimer al año, una enfermedad neurodegenerativa que causa pérdida de memoria severa y afecta a las actividades de la vida diaria.
Desde el Área Integrada de Talavera han recordado en nota de prensa que esta enfermedad, de curso crónico y progresivo, suele aparecer a partir de los 65 años, aunque también puede presentarse entre gente más joven.
Causa pérdida de memoria severa, confusión, desorientación en lugares conocidos, colocación de objetos fuera de lugar y dificultades con el habla y/o la escritura, entre otros problemas, y es uno de los tipos de demencia más comunes.
«Es un deterioro de la memoria más reciente; los pacientes son capaces de recordar lo más antiguo, su infancia, pero no se acuerdan de lo que han comido hoy o de lo que hicieron ayer», ha indicado la especialista en Neurología del centro talaverano María Luisa García.
En este sentido, ha explicado que, con la edad, todos empezamos a tener estas pérdidas de memoria y olvidos, pero que cuando esto empieza a interferir en la vida diaria y da problemas para realizar las actividades normales es cuando hay que consultar con el médico de cabecera para valorar si hay que derivar a los especialistas en Neurología.
La prevalencia del mal de Alzheimer se duplica cada cinco años, a partir de los 65 hasta los 85, y es variable: desde el 1 por ciento a los 60 años hasta el 32,2 por ciento a los 94 años de edad.
Según los expertos, no es una forma normal del envejecimiento y tiene una relevancia socio-sanitaria muy importante, ya que en algunos casos produce desestructuración en la familia porque el paciente necesita un cuidador permanente en la fase aguda.
Su abordaje debe realizarse con un enfoque multidisciplinar y la implicación de profesionales de distintas áreas, médicos, enfermeros, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales y psicólogos.
Su tratamiento es solo sintomático y paliativo, y se recomienda realizar el diagnóstico con una valoración integral en las fases más tempranas al objeto de iniciar las opciones terapéuticas cuanto antes y obtener los mejores resultados posibles.