Insistentemente, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha criticado al Gobierno de España la política del «yo invito y tú pagas», en referencia a las medidas que se llevan a cabo desde el Ejecutivo central, pero no van acompañadas de dotación económica. Por ello, el Gobierno de Castilla-La Mancha va a llevar a la próxima Conferencia de Presidentes una propuesta de resolución para que el Estado deba acompañar de una memoria económica toda decisión que afecte a los ingresos o los gastos de las comunidades autónomas con su correspondiente mecanismo de compensación de los desajustes.
La consejera portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, ha comparecido en rueda de prensa para informar sobre los acuerdos adoptados en el Consejo de Gobierno, uno de ellos esta propuesta de resolución de la Consejería de Hacienda, y ha citado como ejemplo la ley de universidades, que debiera ir acompañada de memoria económica y compensar los desajustes de gasto que supondrá para las comunidades autónomas, o las decisiones que afectan a la recaudación del IVA.
Con ello se evitaría incidir en la infrafinanciación de las medidas o de los servicios que tienen que aplicar las comunidades autónomas por decisiones nacionales y ahondar aún más en la infrafinanciación que afecta a cuatro comunidades autónomas, entre ellas Castilla-La Mancha, y que, de no tomar medidas, cada vez será mayor con el actual modelo de financiación autonómica del año 2009.
Conversación entre los presidentes de las CCAA infrafinanciadas
Hoy, en Fitur, los presidentes de las cuatro comunidades autónomas infrafinanciada han mantenido un encuentro en la inauguración de la feria turística, donde han conversado unos 10 minutos sobre el tema, Emiliano García-Page, Carlos Mazón (Comunidad Valenciana), Juan Manuel Moreno Bonilla (Andalucía) y Fernando López Miras (Murcia) ha estado conversando sobre un tema, en el que Castilla-La Mancha quiere que se compense por los más de 300 millones anuales que no recibe del Estado, según ese informe, pero quiere separar esa compensación del nuevo modelo de financiación, puesto que para esa negociación la región tiene «intereses radicalmente opuestos» a los de esas comunidades autónomas.