La consejera de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha, Mercedes Gómez, se ha mostrado confiada en que la nueva Ley de Cambio Climático en la que está trabajando el Ejecutivo autonómico llegue a las Cortes regionales antes de terminar 2024, y que permita a la comunidad avanzar en la descarbonización y apostar por ella como “mercado”.
En declaraciones a los medios de comunicación antes de inaugurar el II Encuentro Regional de Educación Ambiental en el Museo de Paleontología de Cuenca, Gómez ha manifestado que esta ley será “pionera”, como lo fue la de economía circular.
Mecanismos de descarbonización y de compensación de gases de efecto invernadero
Gómez ha apuntado que los montes de Castilla-La Mancha actúan como “un sumidero muy importante de esos gases de efecto invernadero”, y que en la ley “habrá que arbitrar mecanismos de descarbonización y mecanismos que puedan compensar esos gases de efecto invernadero para las empresas” ubicadas en la región.
Asimismo, ha indicado que la región también puede ser “sumidero de ese carbono de otras empresas a nivel nacional y poder crear también un mercado en ese sentido, que lógicamente tendrá que venir también regulado en esta ley”.
Por otra parte, la consejera ha defendido la región sigue siendo “un referente a nivel nacional, por tercer año consecutivo, al cumplir todos los ítems reflejados en el Informe de Progreso 2023, del Gobierno de España, para la implementación de la Agenda 2030”.
Gómez ha incidido en la importancia de la educación ambiental para afrontar la crisis climática, a través de medidas como este encuentro que se va a celebrar hasta este viernes 26 de enero, que es también el Día Mundial de la Educación Ambiental.
Una cita que se enmarca dentro de la Estrategia de Educación Ambiental, que tiene una inversión de casi cuatro millones de euros, con más de medio centenar de acciones.
También ha avanzado que durante este año está previsto articular dos líneas de ayudas con 160.000 euros, que irán destinados por un lado a entidades sin ánimo de lucro y por otro a centros docentes para visitar espacios naturales.
Al encuentro de Cuenca asisten cerca de 200 participantes para debatir y analizar distintas facetas del cambio climático.