El Rey ha garantizado hoy a las universidades el apoyo de la Corona en su empeño para «superar toda suerte de retos y dificultades» y ha compartido con los alumnos el deseo de que, al concluir sus estudios, «no se vean frustradas» sus ilusiones y esperanzas, sus «aspiraciones y expectativas».
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Acompañado por la Reina, don Felipe ha presidido la inauguración del curso universitario en una ceremonia académica celebrada en el campus tecnológico de Toledo -donde estudian 3.500 de los 32.000 alumnos de la Universidad de Castilla-La Mancha-, en la que han participado el ministro de Educación, José Ignacio Wert, y la presidenta del Gobierno regional, María Dolores de Cospedal; y el rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado, entre otros responsables institucionales y académicos.
En su intervención ante las autoridades, profesores y estudiantes que ocupaban el paraninfo del campus en esta ceremonia, el Monarca ha advertido asimismo de que, aunque España cuenta con un capital humano «de un enorme valor» y «lo conseguido es mucho», los españoles no pueden «caer en la autocomplacencia, ni olvidar que persisten también dificultades y nuevos retos» que han de superar.
Asimismo, ha subrayado que las universidades no pueden limitar sus funciones a los ámbitos de la docencia y la investigación, sino que deben «seguir explorando fórmulas de colaboración» con las empresas «para potenciar el crecimiento económico y la generación de puestos de trabajo».
WERT: «ES FUNDAMENTAL MEJORAR LAS BAJAS TASAS DE INTERNACIONALIZACIÓN»
Por su parte, el ministro de Educación, José Ignacio Wert, ha propuesto hoy que los investigadores y docentes universitarios que realizan su labor en el extranjero puedan acceder en igualdad de oportunidades a las nuevas plazas del sistema universitario español que aquellos que ya están incorporados.
El ministro ha realizado esta propuesta durante el acto de apertura del curso 2014-2015 de las universidades españolas, donde ha confirmado que la tasa de reposición para el personal de las universidades subirá en el próximo año del 10 al 50 por ciento, un incremento que «es un signo inequívoco de la apuesta del Gobierno por la universidad».
Este esfuerzo debe ir acompañado, según el ministro, de «un ejercicio de responsabilidad» por parte de las universidades, que deben asegurarse de que quien acceda a las plazas vacantes que saldrán a concurso sean «los mejores candidatos», evitando «el riesgo de endogamia que tanto daño ha hecho en el pasado».
En este sentido, ha propuesto que los jóvenes docentes e investigadores que hoy trabajan en el extranjero deberían poder competir acceder en igualdad de oportunidades con aquellos que ya se han incorporado al sistema universitario y ha añadido que, para facilitar este proceso, se vertebrarán los procesos de acreditación para asegurar que tenga igualdad la actividad docente y la investigación e incorporando criterios internacionales.
«Es fundamental mejorar las bajas tasas de internacionalización», ha resaltado Wert, que ha apostado por atraer «talento de todo el mundo y en particular de aquellos países con los que se comparte una misma lengua».
También, como reflejo del apoyo del Gobierno central al mundo universitario, Wert ha destacado que por segundo año consecutivo se mantiene el presupuesto de becas y ayudas al estudio, lo que permitirá también mantener el número de alumnos becados, que «fue la tasa más alta de la historia».
De este modo, Wert ha resaltado que el nuevo modelo de becas y el número de alumnos becados «demuestra que los jóvenes tienen la misma capacidad que en otros países, pero que para que alcancen su máximo desarrollo es preciso incentivarlos».
Asimismo, el ministro de Educación también ha animado a las universidades a que apuesten por la especialización, un asunto que «urge debatir» pues ha considerado que para conseguir la excelencia «es necesario que cada universidad analice sus fortalezas y debilidades» y se centre en las primeras para ofrecer «docencia e investigación en las áreas donde puede brillar».