La Unidad de Servicios Educativos (USE) de la Policía Local de Toledo ha advertido de que «las famosas pellas» de los alumnos en los centros escolares de Toledo se dispararon en el pasado curso.
Así lo ha señalado el responsable de la USE, el policía Jesús Nombela, durante la constitución de la Comisión de Absentismo Escolar, que se ha celebrado después de diez años de paralización y que ha estado presidida por el concejal de Educación, Daniel Morcillo, y en la que se ha dado a conocer el seguimiento por parte de esta unidad a 23 alumnos toledanos.
«Hay unos 23 casos de alumnos a los que hacemos un seguimiento, una supervisión y son los más crónicos. No tiene que ver nada con absentismo intermitente u ocasional, que son alumnos que en una situación determinada deciden no ir a clase», ha explicado Nombela.
Ordenanza de Absentismo Escolar
Por su parte, Morcillo, se ha comprometido, “en esta primera toma de contacto”, a escuchar a todos los participantes, “porque la intención del equipo de Gobierno es poner todos los medios a nuestra disposición, para no dejar a ningún chico atrás”.
En este sentido, ha agradecido la labor que lleva a cabo la USE, en colaboración con la Fiscalía de Menores, para detectar los casos de absentismo, que afectan, sobre todo al Polígono, Santa Bárbara y el Cerro de los Palos.
En cuanto a la actuación de esta unidad de la Policía Local, Nombela ha indicado que “cuando estos alumnos absentistas son detectados, son reconducidos al centro educativo de origen y se informa a los padres, aunque las causas de ese abandono de las aulas son diferentes en Primaria y en Secundaria”.
“En los centros educativos de Primaria, en la mayoría de las ocasiones, el absentismo es achacable a los padres, con algunas connotaciones por temas económicos, por temas de trabajo, etc. En el caso de Secundaria, son los propios alumnos los que en un momento determinado dicen ‘no voy a clase’”, ha añadido.
Desde la USE, “aparte de la vigilancia, control, seguimiento y supervisión, que es fundamental, sería bueno plantearnos una ordenanza municipal de absentismo escolar. Llevamos casi 15 años trabajando y lo la tenemos. No tiene por qué llevar unas connotaciones económicas, pero sí que se tuviera en cuenta como requisito que los niños no falten a clase”, ha concluido Nombela.