Es uno de los 83 exconsejeros o exdirectivos de Caja Madrid que utilizaron la ya famosa tarjeta opaca o «black» de Caja Madrid para realizar gastos privados durante casi una década. Se llama Antonio Rey de Viñas y Sánchez de la Majestad, lo era en representación de la federación madrileña CC.OO. (puesto que el sindicato ha iniciado ya los trámites de expulsión) y es natural de Mora (Toledo).
De 62 años, con 18 se fue a Madrid a trabajar en Unión Fenosa y uno después entró en CC.OO. de la capital de España, ciudad donde ha llevado a cabo toda su carrera sindical.
Bien, pues el moracho Rey de Viñas, tal y como marcan los 1.930 apuntes que se han conocido de él en las últimas semanas, gastó nada menos que 191.495 euros (con 79 céntimos) y tiene el «honor» de que en sus cuentas se contabiliza la transacción más barata de todas las que se realizaron, una de cinco céntimos en El Corte Inglés, presumiblemente de una bolsa de plástico para meter la compra anterior, puesto que antes había una factura de 174 euros.
Sus gastos más habituales se reparten entre restaurantes, El Corte Inglés y gasolineras, así hasta en 1.930 ocasiones entre los años 2003 y 2011. Y como la propia CC.OO. ha comunicado, ha decidido «iniciar los trámites de expulsión de los consejeros de la antigua Caja Madrid vinculados al sindicato por el uso de tarjetas opacas al no haber recibido ninguna explicación». Junto a Rey de Viñas habrá otros dos expulsados de CC.OO., Juan José Azcona y el histórico Rodolfo Benito.
El sindicato ha acordado igualmente llevar a cabo «todas las iniciativas legales para que se devuelva la totalidad de las cantidades dispuestas de las tarjetas y se esclarezca si en estos comportamientos hubo algún delito. Buscamos resarcir el inmenso daño que estas prácticas han ocasionado a CC.OO. y sus afiliados».
Rey de Viñas era uno de los consejeros del Consejo de Administración y Comisión de Control de Caja Madrid.