El vicepresidente primero de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, estima que el nuevo Hospital Universitario de Cuenca estará operativo, si se cumplen los plazos, en la Semana Santa de 2025.
El vicepresidente regional ha participado en una visita para que los profesionales sanitarios conozcan el equipamiento del bloque quirúrgico del hospital para que sean ellos quienes decidan las necesidades del servicio dentro de la oferta presentada por la empresa adjudicataria.
Martínez Guijarro ha repasado el calendario que tiene por delante el nuevo Hospital Universitario de Cuenca. A partir de abril comenzará la comprobación de los 4.778 espacios que lo componen por parte de los responsables de la oficina técnica. Si todo está correcto, en septiembre está prevista la recepción del hospital y en ese momento comenzaría el equipamiento de las habitaciones.
El traslado
A continuación se comenzará el traslado para que el nuevo centro sanitario empiece a funcionar en la Semana Santa de 2025, si bien durante un tiempo tendrá que convivir con el Hospital Virgen de la Luz. Está previsto que el área ambulatoria será la primera que empiece a desarrollar actividades.
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El vicepresidente de Castilla-La Mancha ha explicado que ya está prácticamente finalizado todo el equipamiento de alta tecnología, así como la fase constructiva de las instalaciones que se encuentran en la zona de El Terminillo. Faltan trabajos como la robotización de servicios como el de farmacia y adjudicaciones relacionadas con la microbiología y los análisis clínicos. A todo esto habrá que añadir el proyecto de urbanización del entorno, que va a tramitar la Consejería de Fomento y tiene un presupuesto de ocho millones de euros.
Zona quirúgica
Respecto a la zona quirúrgica que han visitado este jueves, Guijarro ha destacado que contará con 16 quirófanos, frente a los 9 que hay en el Virgen de la Luz, y con una superficie que se multiplica por seis, hasta alcanzar los 3.000 metros cuadrados.
El dirigente ha destacado que «uno de los objetivos que nos marcamos es que las camas de la parte de hospitalización no pasen nunca por el bloque quirúrgico y podamos evitar la mayor parte de las contaminaciones que se producen en estas zonas, que son por el paso de equipamiento de la parte hospitalaria».