La Confederación Católica de Padres de Alumnos (Concapa) en Castilla-La Mancha ha pedido al consejero de Educación, Marcial Marín, que no acepte el «chantaje sindical» de firmar un pacto exclusivo para la enseñanza pública, ya que sería un «desprecio» para las familias que optan por la educación concertada.
En un comunicado de prensa, el presidente regional de Concapa, Pedro José Caballero, ha afirmado que la propuesta del sindicato Anpe de alcanzar un pacto para prestigiar la enseñanza pública en Castilla-La Mancha «roza la intolerancia».
La Concapa solicita un «verdadero» pacto por la educación, en los ámbitos nacional y autonómico, pero subraya que para que funcione debe contar con los cuatro interlocutores validos: administración, colegios, profesores y familias.
Para esta organización, «un pacto sin familias no es un verdadero pacto» y por ello critica el «desprecio» que supondría firmar un pacto excluyendo al 18 por ciento de la educación de la región, que es el porcentaje aproximado de la enseñanza concertada en Castilla-La Mancha.
«Las continuas salidas de tono de Anpe en los distintos foros donde participa rozan, una y otra vez, la intolerancia más radical de este sindicato», según Caballero, quien ha añadido que «se demuestra el desprecio más absoluto a las familias que libremente eligen otro tipo de educación para su hijos, conforme a sus ideales y creencias, derecho recogido en el artículo 27 de la Constitución Española».
Ante esta situación, la Concapa insta al consejero de Educación, Marcial Marín, a que «sea valiente y no acepte nunca este chantaje sindical», y agrega que deben buscarse los puntos de acercamiento y de encuentro de cada organización «contando con las familias» y sin distinguir entre público o concertado ya que todos son sostenidos total o parcialmente con fondos públicos.