La atleta Vanessa Veiga se encuentra bien, muy bien, porque ya no es casualidad que vaya acumulando carreras ganadas una tras otra. Este fin de semana ha metido dos en su zurrón, la Carrera Norturna de Toledo y la XVI Carrera Popular de Portillo (Toledo).
Entrando en meta en la Carrera Nocturna de Toledo.
Aunque los atletas caen en el «vicio» de comparar su estado con el de las anteriores temporadas por las mismas fechas, lo mismo que hace Veiga, el hecho de acumular victorias podría significar que, efectivamente, se encuentra bien.
La Carrera Nocturna de Toledo, en principio, no entraba en su calendario, pero le apetecía correrla porque se encontraba «bien, con fuerza y con ganas». Y, claro, al estar con su gente, con su afición, «es imposible no darlo todo, la afición te lleva en volandas, no es posible no correr rápidamente», admite. «Se me calentaron las piernas y…», añade Vannesa Veiga, que terminó «encantada con el circuito, el ambiente y la organización».
Y un día después, el domingo, Vanessa Veiga se regaló un «pique familiar», que ganó, con su marido Julio Rey en la XVI Carrera Popular de Portillo (Toledo). «Siempre gana él, pero esa vez le tocó perder a él, je, je», comenta con satisfacción. «»Creía que me iba a resentir de la carrera nocturna toledana, pero no fue así. La de Portillo es una carrera que me gusta mucho, forma parte siempre del circuito de los ‘Training Rey», añade.
La atleta gallega toledana de adopción avanza que su próxima prueba es el Medio Maratón de Behovia (San Sebastián): «La más antigua de España, que este año cumple su 50º cumpleaños. Aunque no aseguro nada, podría servirme de test para mi posible participación en el Campeonato de España de maratón, en el que me gustaría estar», avanza la campeona.
El Nacional de maratón se celebra el domingo 30 de noviembre. Veiga confiesa sentirse ahora un poco «justa de kilómetros, aunque de forma similar a otros años por estas fechas», concluye.