La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha destacado esta tarde el esfuerzo que esta haciendo el Gobierno autonómico en esta legislatura para mejorar la seguridad vial en las carreteras de la región y eliminar los puntos negros donde más accidentes se producen cada año.
María Dolores de Cospedal, que ha inaugurado la mejora del firme del tramo de la carretera regional CM-412 que une las localidades de Ciudad Real y Picón, ha dicho que forman parte de los objetivos que se fijó el Gobierno regional al inicio de la legislatura, con el fin de evitar accidentes y muertes en la carretera.
La presidenta autonómica ha comentado que el Gobierno regional no está realizando «grandes obras faraónicas», pero si «obras que eran absolutamente imprescindibles y necesarias para todos los días, para el uso de los vecinos y para evitar muertes y accidentes».
Dentro de ese gran proyecto se enmarca la rehabilitación del firme de la CM-412 entre Ciudad Real y Picón, que forma parte del plan de inversiones previsto para esta legislatura en la provincia de Ciudad Real, en la que en estos cuatro años se habrán invertido 20 millones de euros, ha subrayado.
Junto a esta obra se incluyen otras actuaciones importantes como las que se llevaron a cabo en la carretera que une Manzanares y Cinco Casas o la que está previsto que se realice en Campo de Criptana, donde se está acondicionando su travesía.
Todas estas actuaciones forman parte del Plan de Carreteras de Castilla-La Mancha, ha recordado la presidenta autonómica.
Según Cospedal, las obras de adecuación y mejora de esta carretera estaban justificadas por tres motivos destacables, de los que el más importante era la alta concentración de accidentes que se registraba en este tramo y la gran siniestralidad, que hacía necesario actuar sobre la calzada.
También es una zona de gran volumen de tránsito de vehículos, con más de 5.000 al día, de los cuales, el uno por ciento son vehículos pesados, lo que la sitúa como una carretera con tránsito superior a la media al resto de carreteras de ámbito autonómico.
En todo caso, la mejora del firme era necesaria porque se llevaba la «friolera» de 23 años sin hacer ningún tipo de acondicionamiento, ha apuntado Cospedal.
Por otra parte, ha comentado que de estas obras se beneficiarán un gran número de vecinos de los municipios de Picón y Ciudad Real y los de la pedanía de Las Casas.
En este sentido, el alcalde de Picón, Rafael Rodríguez, ha mostrado su satisfacción por estas obras y ha dado públicamente las gracias a la presidenta regional por atender la demanda de los ciudadanos de su municipio.
Por su parte, la alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, destacado la importancia que desde el punto de vista de la seguridad vial tienen las obras, así como que el Gobierno regional apueste por mejorar las infraestructuras básicas, con el fin de mejorar la economía y el desarrollo empresarial de los municipios.
Romero ha recordado que desde el Ayuntamiento de Ciudad Real se venía reclamando desde hace mucho tiempo el arreglo de esta carretera, sin que la petición fuera atendida por los anteriores gobiernos socialistas de Castilla-La Mancha.
La alcaldesa ha valorado: «ha tenido que ser el Gobierno presidido por Cospedal el que finalmente se ha hecho eco de esta petición».
Las obras han permitido la adecuación de un tramo de 13 kilómetros de carretera, en el que se ha mejorado el firme, se han aumentado las defensas laterales de seguridad y se ha adecuado la señalización vertical y horizontal.